El juicio por la desaparición de Marita Verón pasó a un nuevo cuarto intermedio por una semana debido a la ausencia de uno de los imputados, Gonzalo Gómez, a quien se le ordenó arresto domiciliario y que fije residencia en la capital tucumana. El tribunal lo dispuso tras evaluar la documentación del abogado de Gómez, Roberto Flores, sobre la operación de vesícula que le efectuaron a su defendido la semana pasada. El cuarto intermedio se extenderá hasta el martes próximo, día en el que seguirá declarando Susana Trimarco, madre de Marita Verón y principal testigo del caso. La legislación tucumana exige la presencia de los imputados durante las audiencias. Si Gómez incumple lo dispuesto y no se presenta el martes, será buscado por la fuerza pública. El abogado Flores se mostró “conforme a medias” con la decisión y explicó que en las próximas horas Gómez será trasladado a Tucumán desde La Rioja, donde convalece de su operación. El abogado de la querella, Carlos Garmendia, se mostró preocupado por la actitud de Gómez. “Sólo esperamos que no se fugue hasta que llegue a La Rioja (donde vive) la orden de traslado”, comentó. Todos los acusados en el juicio están hasta ahora en libertad.