Un seminario que se realizará en Paraná, Entre Ríos, y que propicia prácticas para “curar” la homosexualidad fue cuestionado por la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (LGBT) y por AllOut.org, organizaciones que realizarán una protesta frente a la sede del evento. Entre hoy y el domingo, el movimiento Desert Stream difundirá “tratamientos” que “empujan a personas LGBT a un espiral de autodestrucción que incluso puede llevar al suicidio”, señaló el presidente de la entidad LGBT, Esteban Paulón.

Las organizaciones de la diversidad solicitan “al gobierno argentino que comience una investigación”. “Logramos captar la atención de la prensa francesa –donde acaba de finalizar la última sesión de Desert Stream– y sabemos que allí el gobierno está evaluando posibles acciones”, aseguró Andre Banks, director ejecutivo de AllOut.org. “Argentina, que ha sido un ejemplo de ampliación de derechos para las personas LGBT, no debe permitir que estos negocios devenidos falsas ‘terapias’ terminen instalándose en el país.”

Los activistas LGBT indicaron que en julio el creador y principal promotor de las “curas” para homosexuales a nivel internacional “hizo un cambio radical de postura, rechazando su propia investigación”. Luego, “la organización principal detrás de estas horrendas prácticas reconoció públicamente que eran inútiles y peligrosas”. Pero “un grupo disidente, denominado Aguas Vivas, se niega a dejar este negocio lucrativo que cuesta hasta 1200 dólares por persona”.