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El gobierno porteño insistió en que deberá reasignar gastos o aumentar impuestos si la Justicia mantiene la suspensión del incremento de la tarifa del subte de 2,50 a 3,50 pesos, lo que fue considerado una “amenaza” por la oposición.

El ministro de Hacienda porteño, Néstor Grindetti, cuestionó la decisión del juez Pablo Mantaras, quien el lunes ratificó la suspensión del incremento de la tarifa a 3,50 pesos. “Cuando el juez dice que le preocupan los usuarios, lo que tenemos que ver también es de dónde van a salir los recursos para solventar el déficit que no se va a poder solventar con la tarifa”, afirmó.

El funcionario explicó que la reasignación de partidas es “muy difícil”, ya que para solventar el subte las autoridades tienen que “perjudicar otro servicio que el Estado también debe prestar con eficiencia como la salud, la educación o la asistencia social”. Sobre la posibilidad de aumentar impuestos, Grindetti manifestó que “hay que ver si el sistema productivo en las condiciones en que estamos resiste un aumento impositivo”.

Por su parte, el legislador porteño del MST-Proyecto Sur, Alejandro Bodart, quien presentó el recurso para suspender el incremento, dijo que el gobierno “amenaza con recortes y más impuestos, en vez de auditar los costos reales y recortar lo que se lleva Metrovías”. Bodart expresó que “una auditoría seria seguramente constataría que durante años la empresa incumplió inversiones, dibujó pérdidas y se embolsó los subsidios estatales. Además de subir los peajes, las patentes, los sellos y el ABL con destino al subte, Mauricio Macri quiere el tarifazo para seguir solventando esa ganancia privada”.

En tanto, el diputado Adrián Camps (PSA) sostuvo que “en la Ciudad ya se han aumentado impuestos para solventar el funcionamiento del subte y fueron aprobados por la Legislatura”.