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Antes de asumir, al intendente electo de Almirante Brown le tocó poner a prueba su sangre fría: Manuel Rodríguez fue víctima junto a su secretario de un secuestro express que duró dos horas y media. La semana pasada fue secuestrado también en ese partido el defensor oficial de Lomas de Zamora Daniel Baca Paunero, quien ayer consideró que la seguidilla de casos en la zona sur es algo más que una casualidad: sin vueltas, dijo que no descartaba que hubiese una zona liberada para que los captores puedan operar con tranquilidad. El secuestro del intendente electo y la denuncia del defensor coincidieron con la renuncia largamente esperada por la Policía de Juan Pablo Cafiero en el Ministerio de Seguridad (ver páginas 8-9).
El episodio de Rodríguez se inició alrededor de las 14.30, cuando circulaba en un Ford Ka junto a su secretario Carlos Gassman. Ambos iban a la Capital Federal para hacer trámites. Al llegar a Frías y Hudson, en Llavallol, frenaron el auto para dejar pasar a dos mujeres. Y allí los interceptó por un Fiat Uno.
“Nos interceptaron de forma muy violenta, con una maniobra absolutamente preparada que no nos dio la posibilidad de nada, exhibiendo armas con total impunidad”, dijo Rodríguez, quien señaló que gracias a que las mujeres hicieron la denuncia, la policía comenzó a intervenir desde un primer momento, con un despliegue que incluyó patrulleros y helicópteros. “Comenzaron a agredirnos verbalmente a insultarnos, pidiéndonos plata y tarjetas de crédito”, relató el intendente electo.
Dos delincuentes subieron al Ford y obligaron a Rodríguez a pasarse a la parte trasera, mientras Gassman fue introducido en el Uno, con el fin de cometer un secuestro express: los asaltantes comenzaron a recorrer la zona con los dos vehículos mientras les sustraían diversos elementos.
A Rodríguez le robaron tarjetas de crédito, el reloj, un celular y la alianza de casamiento que pudo recuperar. “No se conformaron con el dinero que llevaba encima. En un momento me pidieron la clave de la tarjeta, bajaron en lugar determinado y se la dejaron a otro cómplice”, contó. En tanto, los delincuentes siguieron dando vueltas por la zona hasta que en un momento recibieron un llamado del cómplice que les informaba que ya había logrado extraer el dinero del cajero automático. Después de dos horas y media, fueron liberados en José Mármol.
Después de conocerse el caso, el defensor oficial de Lomas de Zamora Daniel Baca Paunero, quien fue víctima de un secuestro express durante seis horas la semana pasada en Adrogué, no descartó que la zona sur del conurbano haya sido “liberada” por la policía para que pueda operar una banda de captores.
El titular de la Unidad Funcional de Defensa 3 aseguró a Télam que su secuestro era previsible, ya que al menos otras diez personas, vecinas de Adrogué y Lomas de Zamora, habían sido víctimas de un episodio similar en los días previos. Si bien el funcionario dijo no saber quiénes son los captores, no descartó que puedan ser miembros de alguna fuerza de seguridad o contar al menos con su apoyo.
“Iban armados y a toda velocidad por la avenida Pavón y el centro de Banfield, y no era tan tarde, apenas un poco más de las 12 de la noche. En un momento éramos seis adentro de un auto y nadie nos paró a pesar de que íbamos muy rápido”, recordó Baca Paunero.
Ayer, además del intendente electo, un técnico químico fue secuestrado en Villa Martelli: fueron cuatro delincuentes que lo encerraron en el baúl de su auto y lo liberaron en la Villa Loyola.