Un joven fue detenido ayer en la ciudad entrerriana de Paraná, acusado de haber asesinado de un balazo en la cabeza a su mujer, en el barrio porteño de Nueva Pompeya. El cadáver fue hallado al día siguiente en la habitación que ambos alquilaban. Ella había comentado a su familia que tenía decidido separarse porque no soportaba más las agresiones físicas de su pareja.

El femicidio ocurrió en la madrugada del jueves pasado, en una vivienda ubicada en el complejo habitacional conocido como barrio Espora, en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires, donde Micaela Gaona (20) convivía con su pareja, con quien tenían un hijo de un año. El cuerpo de Gaona fue hallado al día siguiente, cuando la propietaria de la casa que alquilaba la pareja decidió ingresar al lugar por la fuerza y con la ayuda de efectivos de Prefectura Naval que custodian la zona, ya que desde el interior de la propiedad no respondían a los llamados, pese a que se oía la televisión y un ventilador funcionando. Al ingresar a la propiedad, los efectivos encontraron a la mujer acostada en la cama, tapada totalmente con una frazada y con un impacto de bala en la cabeza. Junto al cuerpo había una almohada manchada de sangre que, se cree, el asesino utilizó para amortiguar el estruendo del disparo. De inmediato, los investigadores apuntaron a la pareja de Gaona como el autor y salieron en su búsqueda.

La policía averiguó que el hombre tenía parientes en Paraná, por lo que montaron, con la colaboración de la policía entrerriana, una discreta vigilancia en las casas de esos familiares hasta que lograron detenerlo, quedando alojado en la Comisaría 5ª de Entre Ríos. En breve será trasladado a la Capital Federal para ser indagado por un juez de Instrucción de turno.