La Justicia de Mar del Plata pidió la elevación a juicio de una causa que tiene como imputado al líder ultraderechista marplatense Carlos Gustavo Pampillón, el mismo que el domingo 11 de octubre pasado participó en la agresión sufrida por un grupo de manifestantes, en el cierre del Encuentro Nacional de Mujeres. La acusación fue presentada por el fiscal federal número 2 de Mar del Plata, Nicolás Czizik, quien requirió la elevación a juicio parcial de una causa en la que Pampillón, líder del Foro Nacional Patriótico (Fonapa), por los daños cometidos en el monumento Memoria, Verdad y Justicia que se levanta en la Base Naval de la ciudad balnearia, donde funcionó un centro clandestino de detención durante la dictadura cívico-militar, y por atentado e inscripción de pintadas discriminatorias contra Centro de Residentes Bolivianos.

En un dictamen que incluye el listado de casi 60 medidas de prueba, el representante del Ministerio Público consideró acreditado que entre la noche del 7 de septiembre de 2011 y las primeras horas de la madrugada siguiente, un grupo de personas instigadas por Pampillón dañaron el monumento conmemorativo, en la entrada de Base Naval. Sobre el letrero horizontal que dice “aquí funcionó un centro clandestino de detención”, integrantes del grupo que lidera Pampillón escribieron: “Aquí se defiende la patria”.

Además, sobre el pilar que pide “justicia”, agregaron con aerosol “para todos”; en el que señala “memoria” añadieron “completa”, y en el pilar dedicado a “verdad”, estamparon su firma: “Fonapa”. Al mismo tiempo, durante la manifestación, los seguidores de Pampillón dieron vivas al capitán de la Armada Pedro Giachino, caído en la guerra por las Malvinas.

El fiscal afirmó que “el ataque al monumento se realizó en repudio a la decisión del Concejo Deliberante de esta ciudad de quitar el cuadro del Capitán Giachino que estaba colgado en el recinto”. El segundo hecho que se adjudica a Pampillón como instigador ocurrió entre la medianoche del 24 de febrero de 2014 y las primeras horas del día siguiente.

Se le atribuye a Pampillón haber instigado a un grupo de personas a que dañaran el Centro de Residentes Bolivianos, en avenida Colón 9040. En el lugar, previo a blanquear la pared, escribieron: “Fuera Bolivia de Salta. La Patria no se negocia. Ojo... arderá el escarmiento. Fonapa-La Giachino, viva la patria carajo”. También incendiaron una parte del portón lindero al muro del centro de la comunidad boliviana.

El fiscal sostuvo que “además del móvil discriminatorio, la agresión estuvo inspirada en el deseo de venganza contra la decisión de la Comisión Nacional de Límites (Conali) de colocar nuevos mojones sobre la línea recta limítrofe con el Estado Plurinacional de Bolivia, colocando un séptimo hito en el Sector Abra de Santa Cruz en la provincia de Salta”.

Por otro lado, el dictamen fiscal detalló que “el imputado representó en la psiquis de sus seguidores los distintos daños que había que causar, los motivos ideológicos de los mismos y las formas de llevarlos a cabo; todo ello en el marco de un liderazgo que hartamente se encuentra probado y que el nombrado reconoce, por lo que corresponderá que de momento responda a título de instigador o determinador”.

La Fiscalía 2 también se investiga otro ataque al mismo sitio de memoria, en la Base Naval, causa que había iniciado el fiscal Pablo Larriera. A principios de julio la Cámara Federal de Apelaciones de Mar del Plata, por unanimidad, había resuelto confirmar el procesamiento de Pampillón.

Los hechos que se le adjudican fueron calificados como delitos de daño doblemente agravado, por haberse cometido en venganza de la determinación de una autoridad y por tratarse de un monumento y también por su carácter discriminatorio en razón de la nacionalidad de las víctimas, respecto al ataque contra el Centro de Residentes Bolivianos.