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Luego del brindis de Navidad y Año Nuevo: los fuegos artificiales. Según las estimaciones que realizó la Cámara que agrupa a las empresas del ramo en todo el país, durante estas fiestas la venta de pirotecnia aumentó en un 30 por ciento con respecto al año pasado. Si bien el fuerte sigue siendo la importación, la fabricación nacional aumentó en forma considerable. Aunque los consumidores no lo noten, los precios son bajos, sostienen los empresarios del sector. Tal vez por eso, estiman, ha caído de manera importante la venta de material ilegal. No obstante, los procedimientos realizados por el Registro Nacional de Armas (Renar) –a cargo de los controles– demuestra que la producción clandestina sigue existiendo.
“Todavía no tenemos una medición exacta, sabemos que hay un incremento de venta bastante importante con respecto al año pasado, que ascendería a un 30 por ciento. La producción nacional aumentó notablemente y creó muchas fuentes de trabajo. El 25 por ciento de los productos que se venden en el país son de fabricación nacional, y el 75 por ciento corresponde a productos provenientes de Brasil y en su mayoría de China”, afirmó el vicepresidente de la Asociación de Industriales, Comerciantes y Usuarios de Pirotecnia, Explosivos y Afines (Aicupea), Luis Borca.
Entre los productos más vendidos, para adultos, se encuentran los petardos, cañas voladoras, morteros, rompeportones, baterías y triangulitos. Y entre los infantiles, los fosforitos, bengalitas y estrellitas. Los precios de los productos oscilan entre los 10 centavos y los 30 pesos aproximadamente, según la complejidad.
“Las ventas del año pasado y del anterior fueron un desastre. Pero este año en mi empresa aumentaron un 20 por ciento, sobre todo la venta de los productos de fabricación nacional, porque son los de precios más bajos”, señaló el presidente de la Subcomisión de Pirotecnia de Aicupea y representante de la empresa Fuegos Artificiales Júpiter, Enrique Gallo.
El Registro Nacional de Armas (Renar) se encarga de efectuar controles de producción, almacenamiento y venta de pirotecnia. El lugar donde se almacena la pirotecnia debe cumplir con una determinada construcción y superficie, no hay que almacenar junto a sustancias inflamables, debe haber varios matafuegos, una cuidadosa instalación eléctrica, no se deben apilar los productos, entre otros requisitos.
Según el coordinador de Explosivos y Materiales Controlados del Registro Nacional de Armas (Renar), Anastasio Siderakis, un producto legal de bajo riesgo y de riesgo limitado presenta, respectivamente, en su envase los códigos A11 y B3, además del nombre del fabricante o importador y las instrucciones de uso del elemento.
“La gente está comenzando a colaborar un poco más y a tomar más conciencia de los riesgos de los productos ilegales”, agregó Siderakis; también informó que se secuestraron 35 toneladas de fuegos artificiales, en su mayoría de fabricación ilegal.