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“Todo parece indicar que entre Matías Migliorini –de 17 años– y Luis Bonelli se encuentra el autor del crimen, mientras que Hugo Migliorini sería el cómplice que los esperó en el auto.” Para los investigadores del asesinato de Adrián Faldutto, el custodio del ahora canciller Carlos Ruckauf muerto el viernes durante un asalto a una confitería de Palermo, el caso está casi resuelto: “Existen muchas pruebas que refuerzan la hipótesis de que ambos estuvieron en el lugar junto a Bonelli –el joven de 20 años fallecido en el asalto–. Entre éstas, el secuestro de zapatillas y ropas con sangre, escuchas telefónicas, relatos de testigos y hasta una bala alojada en una pierna de Matías Migliorini que habría sido disparada por Faldutto antes de morir”. Por lo pronto, los acusados declararon ayer en Tribunales y fueron derivados al instituto de menores Luis Agote, de la Capital, y a un penal del Servicio Penitenciario.
Luego de permanecer incomunicados sábado y domingo en la comisaría Nº 53 del barrio porteño de Palermo, los dos imputados, Hugo Migliorini, de 49 años, y su hijo Matías, fueron trasladados ayer por la madrugada al edificio de Tribunales de la calle Talcahuano, donde horas después el primero fue indagado por la jueza María Fontbona de Pombo, mientras que al segundo le tomó declaración el juez de menores Horacio Barberis. Si bien el juzgado Nº 45 a cargo de Fontbona prefirió no brindar información acerca del resultado de las indagatorias, se supo que éstas contaron con la presencia del fiscal de la causa, Rodolfo Pociello Argerich, y la defensa oficial de los acusados. “La causa fue calificada como ‘robo y homicidio’, que prevé penas de hasta 25 años de cárcel”, informó una fuente a Página/12, quien comentó que “probablemente Hugo Migliorini haya sido trasladado al penal de Ezeiza”, donde permanecería alojado hasta la fecha del juicio.
Los Migliorini habían sido detenidos durante la madrugada del sábado en diferentes allanamientos realizados en Munro y Zárate. Según confiaron los investigadores a la agencia Télam, el menor de ellos fue apresado en casa de familiares, sospechado de haber ingresado al bar junto con Bonelli y efectuado el disparo que dio en la cabeza del custodio, mientras que su padre lo habría esperado en un Peugeot 405 en las inmediaciones del bar donde se produjo el tiroteo. También respecto de Matías Migliorini, Norberto Gabilán, comisario de la seccional Nº 53, aseguró que el joven ya había estado detenido en su comisaría “en noviembre del año pasado, luego de haber participado en el robo a un supermercado de la cadena Disco” ubicado también en Palermo.
Gabilán sostuvo además que en aquella ocasión el menor había sido detenido junto con otras personas “con armas de fuego y dinero robado en su poder”. “Al grupo se lo buscaba por el asalto a cuatro o cinco supermercados y varios bares de la zona”, detalló el comisario, quien explicó que Migliorini hijo se encontraba en libertad ya que “fue entregado a sus padres en los primeros días de marzo por orden del juzgado de menores que intervino en la causa”. Al igual que Migliorini, el joven fallecido Bonelli también contaba con antecedentes penales: “Gozaba de salidas laborales ya que estaba procesado y con prisión preventiva por el asesinato de un muchacho de apellido Pillarou, ocurrido el 4 de abril del año pasado en Munro, partido de Vicente López”, dijeron las fuentes. Bonelli murió aparentemente al recibir un tiro en la espalda de parte del custodio, quien le habría disparado ya herido de muerte.