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Líneas ocupadas, llamados que se cortaban o mensajes oficiales de las empresas telefónicas que, tras el discado, manifestaban la imposibilidad de comunicarse con uno u otro número. Las comunicaciones sufrieron ayer un colapso en las líneas de la Ciudad de Buenos Aires, sobre todo en los celulares. La razón no estuvo vinculada a una falta de inversión en el área tecnológica o a falencias en el mantenimiento. El desborde se debió al tradicional Día del Amigo. Según coincidieron las compañías de telefonía celular, la cantidad de llamadas fue similar a la de una Navidad o Año Nuevo. La fecha también provocó un importante aumento de reservas en los restaurantes de Capital Federal y un incremento en el número de eventos realizados.
Las principales empresas operadoras de telefonía móvil admitieron que tuvieron inconvenientes en sus sistemas, debido al fuerte aumento de las llamadas. Fuentes de Unifón indicaron a Página/12 que ayer la cantidad de envío de mensajes de texto “se quintuplicó” porque, además, este modo de comunicarse “es más barato que el llamado”. Los voceros explicaron también que “este año notamos un incremento mayor en comparación a años anteriores”.
Las empresas de telefonía celular coincidieron en que “el incremento del tráfico de llamadas se mantuvo durante todo el día”. Fuentes de Movicom manifestaron que “tuvimos un desborde en el número de comunicaciones por el Día del Amigo”. Incluso, portavoces de las compañías líderes admitieron recibir varias consultas de los clientes debido a la imposibilidad de comunicarse. De todos modos, aclararon que, tras un par de intentos, en general los clientes lograban “conectarse con el número deseado”.
“Siempre tenemos algún problema en fechas como el 20 de julio, pero la verdad que esta vez fue algo peor que en los años anteriores”, reconoció un portavoz de una de las compañías líderes del sector. Sin embargo, las complicaciones en el servicio no sólo alcanzaron a las líneas móviles, sino que también las fijas y hasta la conexión telefónica de Internet registraron dificultades. Las empresas estimaron, además, que el incremento pudo haber estado ayudado por las promociones que las compañías de telefonía celular lanzaron en las últimas horas.
Los festejos por el Día del Amigo, inventado por el argentino Enrique Febbraro hace 35 años, también se trasladaron a la cantidad de eventos llevados a cabo. Ayer “las empresas realizaron más festejos que otros años. Pero las que más eventos hicieron fueron las compañías chicas, por el tipo de relación que tienen con sus empleados”, explicó la organizadora de eventos Valeria Lagna Fietta.
En tanto, el presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Bares y Cafés de la ciudad, Carlos Gutiérrez García, sostuvo ayer que “la mayoría de los restaurantes porteños trabajó con casi todas sus mesas reservadas”. El dirigente empresario explicó que ésta es una tendencia que se acentuó en los últimos dos o tres años y que ahora “justo se da en las vacaciones de invierno, cuando hay mucha gente del interior y del exterior”. Como consecuencia, los locales para cenar, especialmente aquellos que tienen espectáculos, “tuvieron la capacidad colmada”.
Por su parte, la Asociación de Amigos de la Avenida Corrientes realizó ayer su tradicional almuerzo, con más de 1000 invitados, al que asistió el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, con varios miembros de su gabinete. La reunión fue organizada, además, por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), por lo que asistieron representantes de numerosas organizaciones de la ciudad.