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Los taxistas que recorren las calles de La Plata hallaron una idea curiosa para intentar combatir los robos de los que son víctimas: viajar armados. Para eso, le pidieron ayer al ministro de Seguridad bonaerense, Carlos Arslanian, que los autorizara a llevar armas de fuego en sus autos. “Es para protegernos nosotros mismos”, intentó explicar Juan Carlos Berón, secretario general del Sindicato de Conductores de Taxis, y aclaró que no las usarían “alocadamente”. El ministerio rechazó de plano el pedido, aunque aclaró que tampoco sería su facultad hacerlo.
Según denuncian los taxistas, en los últimos tiempos hubo diferentes hechos de violencia que los tuvieron como blanco en La Plata. De acuerdo con su relato, la paciencia terminó de consumirse siete días atrás. “Hace una semana le pegaron un tiro en el estómago a un taxista en un robo y no se murió de casualidad. Todos los fines de semana roban a entre 15 y 20 taxistas”, se quejó Berón ante Página/12.
Para contrarrestar los episodios de “suma violencia”, los conductores presentaron una iniciativa, cuanto menos, polémica. El pedido incluye que se los autorice a llevar armas en los vehículos. “Pero la idea no es utilizarlas alocadamente –detalló Berón–, queremos que la policía nos dé cursos para saber cómo y cuándo usarlas.” Los choferes hicieron otro reclamo vinculado a la seguridad: que la municipalidad los exima del uso del cinturón de seguridad. “Es para evitar que los delincuentes los utilicen para ahorcarnos y luego robarnos”, argumentan.
En el Ministerio de Seguridad descalificaron totalmente la propuesta. “Desaconsejamos absolutamente que la gente ande armada –indicó a Página/12 Martín Arias Duval, subsecretario de Seguridad de la provincia–. El solo hecho de portar armas cuadruplica las posibilidades de que la persona resulte víctima de un disparo, incluso de la propia arma que se porta.”
Además de las cuestiones estadísticas, en el ministerio esgrimen motivos operativos en contra de la propuesta de los taxistas. La autoridad de aplicación de la Ley de Armas no es provincial, sino nacional: el Renar. Por lo que la decisión de otorgarles permisos para llevar armas a los taxistas platenses no puede surgir de la cartera provincial, y “eso no lo puede desconocer el secretario general de un sindicato”, sostuvo el funcionario.
Por otra parte, los pedidos de portación deben ser individuales y no colectivos, como pretende el sindicato. Y quien quiera acceder al permiso de portación debe probar que es idóneo, debe tomar cursos de capacitación con instructores de tiro, no debe poseer antecedentes penales y tiene que ser apto tanto física como psicológicamente. “La actividad de los taxistas no está prevista en la ley de armas como una que pueda necesitar permisos de portación, sobre todo teniendo en cuenta que se trata de un servicio público”, apuntó Arias Duval. Para Berón, todo eso estaría resuelto porque “somos gente decente, que tiene un registro profesional. Somos gente común”.