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No será el comienzo del juicio político pero se trata del primer paso formal para avanzar en el proceso que definirá la suerte de Aníbal Ibarra. Con la convocatoria del presidente del Tribunal Superior de Justicia, Julio Maier, los legisladores que integran la Sala Juzgadora se reunirán hoy para terminar de definir el número de testigos que podrán presentarse. La sesión también deberá resolver la permanencia de Gerardo Romagnoli, el legislador zamorista a quien Ibarra pidió que se apartara por prejuzgamiento.
La citación de Maier se conoció luego de que varios de los legisladores lo acusaron de “entorpecer los tiempos del proceso” y decidieron “autoconvocarse” para apurar los plazos. Sin embargo, la decisión no aplacó las críticas en el palacio de Yrigoyen y Perú. “No se conoce cuál será el temario y ni siquiera recibimos una notificación formal”, se quejó el legislador de PRO Roberto Destéfano al enterarse de la convocatoria. Por su parte, el magistrado respondió que la sesión de hoy ya había sido acordada el jueves con el vicepresidente del cuerpo, Santiago de Estrada, y rechazó las versiones que hablaban de la supuesta demora en la marcha del juicio. Se trata de un tema que preocupa tanto al ibarrismo como a los que promueven la acusación, ya que de no llegar a un veredicto antes del 15 de marzo, Ibarra quedaría absuelto.
Para hoy está previsto el tratamiento de dos cuestiones. Por un lado, se deberá determinar cuántos de los 148 testigos presentados serán los que finalmente se cite. Según pudo saber este diario, la cifra que manejaba Maier era de unos 34 para la defensa y 95 para la acusación. La decisión contaría con la aprobación de los distintos sectores que la consideraron “razonable”, con lo que no habría mayor debate sobre el tema.
Lo que sí parece generar mayores dudas es el futuro de Romagnoli, sobre quien pesa el pedido de recusación realizado por Ibarra luego de que el legislador lo comparara con el comisario acusado por las muertes de Kosteki y Santillán, Alfredo Fanchiotti. La mayoría de los legisladores duda de que por esas declaraciones deba ser juzgado en función de lo establecido en el Código Procesal Penal –al que remitió el jefe de Gobierno para pedir su apartamiento del caso– y considera que está amparado por la Constitución porteña que le otorga inmunidad de palabra a los diputados. Pero lo que más especulaciones despierta es qué pasaría si se concreta su apartamiento del caso. Hasta el momento, dos versiones consiguieron tener mayor eco. Una sostiene que su lugar no debe ser cubierto, mientras que otra habla de la posibilidad de que sea reemplazado por la socialista Verónica Gómez, un dato relevante para el futuro que pueda tomar el proceso ya que Gómez, con la que Romagnoli fue a sorteo por una vacante de la Sala, es aliada del ibarrismo.
Mientras tanto, ayer continuó el debate generado a raíz del fallo de la Cámara del Crimen, que el jueves revocó el procesamiento por homicidio de cinco ex colaboradores de Ibarra. Contra lo que planea plantear su defensa, que tomará esa sentencia como eje de sus presentaciones, varios legisladores consideraron que la decisión de la Justicia no tiene por qué repercutir en el proceso político. “Son escenas totalmente separadas, una corresponde al campo de la investigación penal y otra totalmente distinta es la del juicio político. Si Ibarra las quiere vincular, tiene que entender que lo que acá se está cuestionando es su responsabilidad política y no la penal. El objeto de este proceso es su incumplimiento por los deberes de funcionario público”, comentó a Página/12 la legisladora de PRO Gabriela Michetti. De igual manera, la legisladora por el bloque unipersonal Autonomía Popular, Beatriz Baltroc, justificó el juicio político, al que diferenció de “un proceso penal contra los funcionarios”. Más allá de la discusión que se pueda generar sobre la pertinencia de los argumentos de Ibarra, lo cierto es que la decisión de la Cámara podría tener consecuencias concretas en el proceso. Durante el fin de semana, los legisladores que integran la Sala Juzgadora recibieron la visita y el llamado de familiares de las víctimas de Cromañón y ya se especulaba con la posibilidad de que algunos de ellos la usen para abstenerse de la votación.

Informe: Carolina Keve.