SOCIEDAD › INVESTIGAN LA EXTRAÑA MUERTE DE ANIMALES. PODRIA SER OBRA DE UNA SECTA
Quién roba los órganos de las vacas
Los cadáveres de los animales –ya son casi 60– empezaron a aparecer hace unos dos meses y llamaron la atención. La mayoría tiene cortes perfectos, como hechos con bisturí, y les extrajeron los órganos y la sangre. La policía se inclina a pensar en una secta.
En pleno campo, aparecieron mutilados y en posiciones extrañas. Casi 60 animales muertos en 18 localidades del sudoeste bonaerense y sudeste pampeano están provocando la preocupación de los productores agropecuarios y del Senasa, además de una variada e imaginativa gama de teorías para explicar el fenómeno. La policía bonaerense, que empezó a investigar quiénes pueden haber cometido estos hechos, orienta su pesquisa hacia alguna secta, que pretendería extraer la sangre y los órganos de los animales con el objetivo de celebrar sus rituales. Las explicaciones son otras en las zonas afectadas, donde se vive un clima de incertidumbre y temor: allí muchos de los habitantes divulgan la idea de la presencia de extraterrestres, de la que la muerte de los animales es sólo una señal más. Los restos de varias vacas serán trasladados a la Universidad de Buenos Aires para un análisis pormenorizado de las causas de su deceso.
En una región de aproximadamente 200 kilómetros que abarca distritos de Buenos Aires y La Pampa, comenzaron hace dos meses las sorpresivas apariciones de animales muertos, cuyos órganos fueron extraídos con suma precisión y sin rastros de sangre a su alrededor. En las últimas dos semanas, una seguidilla de casos similares encendió la alarma entre productores y veterinarios. En total, 58 vacas y un caballo fallecieron en extrañas circunstancias y sus cadáveres fueron descubiertos en modos que los veterinarios no están en condiciones de explicar.
“Cuando llegamos al campo vimos al animal como arrodillado, le faltaba una oreja, el ojo izquierdo, el útero –relata sin descansar Sergio Kupersmit, productor de Rivera–. Tenía el cuero cortado en forma de U en la parte de la quijada y la lengua también.” Kupersmit no sale de su asombro. Hace un mes vio con sus propios ojos esta escena en el terreno de su propiedad en el que pastan 600 vacas. “Estaba como quemado o cortado con láser, con la forma de un círculo”, agrega.
También un veterinario de Rivera se mostró sorprendido. “El lunes pasado fui a ver la vaca de un cliente y le encontré los detalles que había escuchado de otros casos”, contó a este diario Jorge Robles. “Los cortes son casi perfectos y no sangrantes, por lo que no puedo encuadrar esto dentro de las patologías o técnicas quirúrgicas clásicas”, dice. No fue el único animal que vio en estas condiciones: otra vaca, un novillo, un ternero y hasta un caballo fueron los siguientes. “En la localidad todo se está canalizando a través de laboratorios y facultades”, señala y admite que en 22 años de experiencia nunca vio una situación parecida.
Si algo sobra en esta historia son las versiones. La policía bonaerense se inclina por la teoría de la secta: “Hay antecedentes –explicó un vocero a Página/12–, con corderos y gallos. Les sacan algunos órganos y la sangre, para usarla en rituales”.
En los pueblos escuchan la teoría con reservas: dicen que en ese caso debería tratarse de una organización lo suficientemente poderosa como para contar con elementos quirúrgicos –podría tratarse de láser o bisturíes– y para trasladarse “por vía aérea”, ya que todos aseguran que no hay huellas ni de vehículos ni cortes en los alambrados perimetrales que rodean a los terrenos. Otros se inclinan por una visión más conspirativa: una suerte de complot de empresarios de la zona con la oscura intención de provocar el miedo de los habitantes y poder comprar las tierras a bajo precio.
Ninguna de las hipótesis anteriores tiene demasiados adeptos en el campo. Lo sobrenatural, lo desconocido, en definitiva, lo extraterrestre es la “explicación” favorita de los habitantes de los distritos afectados. “Todo el mundo está comentando los casos y lo raro es que nadie vio nada extraño, además hay cuestiones muy raras porque ningún animal se le acerca al que está muerto”, apunta Kupersmit. Las teorías pueden llegar al delirio: un animal parecido al mono “de 1,20 metro de altura y 35 kilos de peso, con rasgos de vampiro” y que “cambia de colores como el camaleón” fue señalado por vecinos de Puán como el causante de “todos los desastres que están pasando con los animales”. Un productor de General Acha cortó la cabeza de un animal mutilado y la guardó en el freezer, por lo que será enviada a la Universidad de Buenos Aires “para tratar de encontrar algunas respuestas”, de acuerdo a Daniel Belot, veterinario del Senasa de Salliqueló. “Los cortes analizados tienen ángulos de noventa grados o que dibujan una circunferencia perfecta y además en el caso de las cabezas, aparecen los maxilares limpios sin que haya sido lastimado o rayado el hueso, lo cual es imposible de hacer”, describió. Los órganos que faltan no son particularmente comestibles, por lo que el cuatrerismo estaría casi descartado.
Los animales encontrados no despiden olor y están “blandos”, sin el habitual “rigor mortis”, explican. Algunos, además, no tienen sangre. “Hasta ahora nadie le encontró explicación a todo esto –plantea el productor Kupersmit– Y si los científicos no nos dicen algo, no sabemos qué pensar tampoco.”
Producción: Romina Ruffato.