Tres estruendos de disparo. Como consecuencia, dos muertes, de una niña de 8 años y de su madre. Todo en el lapso de 10 segundos. La fugaz y mortal secuencia se produjo horas antes de la cena de fin de año en Mar del Tuyú cuando, según la investigación policial, una psicóloga residente en el barrio porteño de Saavedra y de vacaciones en esa playa de la costa atlántica, tras discutir con su marido, mató a su hija de dos balazos y se suicidó con la misma arma.

Las primeras líneas de la investigación apuntan a que todo se desencadenó cuando la presunta filicida y suicida, Silvia Iceta, discutió con su esposo, un militar retirado, sobre la cena de fin de año que iban a preparar para unos amigos del hombre. Instantes después la mujer, que según algunos de sus familiares padecía problemas mentales, habría realizado los disparos que terminaron con su vida y la de su hija.

El episodio ocurrió en una vivienda ubicada en la calle 81 entre 2 y 3, donde Iceta, su marido y la pequeña hija de la pareja habían comenzado sus vacaciones el último sábado. En la noche del domingo, el matrimonio protagonizó una discusión en torno de la comida que debía preparar para amigos del militar retirado.

Luego de eso, y siempre según fuentes policiales, el hombre –de 57 años– fue al fondo de la casa mientras que la mujer y la niña se quedaron adentro. Instantes después, se escucharon los estruendos de dos disparos seguidos y un tercero a los pocos segundos.

Ante esto, el esposo de Iceta entró en la vivienda para ver qué había ocurrido y encontró a su hija muerta con dos balazos en la espalda, uno de los cuales le atravesó un pulmón y el corazón, según los informes forenses. Luego el hombre buscó a su mujer y la encontró muerta, tirada sobre un gran charco de sangre en el baño.

La hipótesis que indica que Iceta asesinó a su hija y después se suicidó se fundamenta, según fuentes de la comisaría de Mar del Tuyú, en que los testigos escucharon tres disparos efectuados en el término de diez segundos, y que el tiro que mató a la mujer ingresó por la sien. En esta línea de investigación juegan un papel fundamental los problemas mentales que según familiares sufría la psicóloga desde hace muchos años.

“Varias indicios llevan a pensar en la posibilidad del crimen y posterior suicidio: el orificio de bala en la mujer es en la sien y los tres disparos se dieron en diez segundos según aseguraron los vecinos. Además, la señora tenía antecedentes psiquiátricos”, enumeró uno de los policías de Mar del Tuyú que llevaron a cabo las primeras investigaciones del caso.

En ese sentido, las declaraciones de los parientes indican que la señora había tenido una infancia traumática, y que de adolescente había sufrido la muerte de un novio, lo que le provocó un estado de depresión muy profundo. “En varias oportunidades los familiares estuvieron a punto de internarla en una clínica psiquiátrica”, señalaron fuentes de la investigación que hablaron con parientes de Iceta.

La policía llegó a la vivienda donde ocurrió todo luego del alerta que realizó un vecino a través de la línea 911. En el lugar se secuestró un revólver calibre 38 que es propiedad del esposo de Iceta y, según las fuentes, estaba registrado legalmente.

Las pericias forenses revelaron que la hija del matrimonio recibió dos balazos por la espalda. Uno de ellos traspasó un pulmón y el corazón, mientras que el otro ingresó por uno de sus codos y quedó alojado en el brazo.

El ex militar fue demorado unas horas en la comisaría para que prestara declaración, pero fue liberado pocas horas después. El caso, caratulado como “homicidio y suicidio”, es investigado por personal de la comisaría de Mar del Tuyú y la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada del Departamento Judicial de Dolores.