Un testigo clave para la defensa del ex policía de la Bonaerense Ramón Medina, acusado de asesinar a quemarropa a Pablo Martinoli hace diez años, se dio vuelta en plena declaración y descargó contra Medina “toda la verdad porque le dolía el alma”. El testigo había sido convocado por la defensa porque en la instrucción había declarado que quien disparó contra Martinoli fue Alejandro Medina, hijo del acusado y también policía, quien ya había sido condenado por lesiones. Pero el testigo modificó su declaración y reveló que, si bien Medina hijo había herido a Martinoli en una pierna, el padre fue quien remató a la víctima de un disparo en la cabeza.

El 9 de abril del ‘97, Pablo Martinoli y Jorge Alejandro Malvido fueron perseguidos por el policía Alejandro Medina por motivos que aún no están aclarados, hasta que éste pidió ayuda a su padre, Ramón. Ambos salieron en busca del dúo y cuando los localizaron, comenzaron la persecución. En un momento dado, Alejandro Medina disparó, hiriendo a Malvido en el abdomen. Hasta ayer, la defensa sostenía que Medina hijo también había disparado contra Martinoli provocándole la muerte.

Alejandro Medina ya había sido juzgado y condenado por el hecho, y había cumplido la condena lo que, aparentemente, lo liberaba de responsabilidades. Jorge Malvido, padre de Jorge Alejandro (que murió baleado durante un asalto el año pasado), fue citado por la defensa porque en su declaración durante la instrucción había declarado que quien disparó contra Martinoli había sido Medina hijo. Pero ayer se dio vuelta. “Voy a contar la verdad porque me duele el alma”, aseguró Malvido y relató que el hijo de Medina había disparado contra la víctima pegándole un tiro en un glúteo, pero que fue Medina padre quien se acercó y disparó a quemarropa contra Pablo Martinoli.