SOCIEDAD › ¿POR QUE ARMANDO HART?
Un pensamiento latinoamericano
Por L.B.
Armando Hart fue uno de los principales dirigentes de la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista en Cuba. Tras el triunfo de la Revolución fue ministro de Educación y luego de Cultura, y su esposa, Haydée Santamaría, militante del Movimiento 26 de Julio prácticamente desde su fundación, dirigió Casa de las Américas. En la actualidad Hart es director de la Oficina del Programa Martiano del Consejo de Estado de Cuba.
La tentación de hablar sobre la historia de la Revolución Cubana es muy fuerte cuando se está con uno de sus principales protagonistas. Su génesis entre los grupos juveniles del Partido Ortodoxo, el surgimiento del liderazgo de Fidel Castro y las distintas polémicas que debieron resolver en el camino para afianzar el proceso que habían iniciado, así como las metas, inéditas hasta ese momento en América latina, que iban alcanzando.
Sin restar importancia a los demás logros sociales y políticos, Hart asegura que el más importante se dio en el plano cultural “porque es el que afirma la conciencia nacional y el que más puede pesar ahora”. Subraya que la cultura no sólo es un logro importante para la Revolución, sino que es imprescindible para abrir nuevos caminos. “La tarea de los intelectuales es profundizar en el fenómeno sin dejarse dividir por circunstancias coyunturales”, afirma en relación con la situación en América latina. Y en este sentido apunta a las fuentes del pensamiento latinoamericano, encuentra en el Che y Fidel la síntesis del pensamiento científico europeo con el pensamiento utópico latinoamericano y rescata lo real maravilloso de Alejo Carpentier, la Teología de la Liberación o el movimiento de educación popular como productos culturales de América latina. Pero aclara que no hay recetas, “a los sabios los hacen dogmáticos sus intérpretes”, advierte.