“Si reciben la orden de evacuar, síganla”, advirtió el presidente de Estados Unidos, Barack Obama. El mensaje fue dirigido principalmente a los ciudadanos de los estados de Virginia, Massachusetts, Nueva York, Nueva Jersey y sus alrededores. El mandatario sostuvo este imperativo en base a que “todos los indicadores” que le reportaron sus asesores “apuntan a que éste será un huracán histórico”. Debido a la inminente llegada de Irene a territorio estadounidense, Obama debió adelantar anoche su regreso a Washington desde Martha’s Vineyard, donde estaba de vacaciones.

Entre una serie de advertencias que lanzó a través de los medios, el presidente indicó a los habitantes de Nueva York y todas las zonas declaradas en alerta que si “están en un lugar por donde va a pasar el huracán, tienen que tomar precauciones ahora”. “Todos nosotros debemos tomar este huracán con seriedad. Ustedes tienen que escuchar a las autoridades locales y estatales”, recomendó Obama.

“No esperen y no se retrasen”, fue la consigna que lanzó el dirigente demócrata para persuadir a la ciudadanía de que avance en las acciones precautorias. “Si reciben la orden de evacuar, les ruego hacerlo”, enfatizó, luego de recibir la información de parte de los expertos de la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de que Irene ponía a los Estados Unidos ante una potencial catástrofe.