SOCIEDAD
Un lugar apto para choques
Cruce de rutas asfaltadas sin iluminación, sin rotonda, sin semáforo y con accidentes. La intersección de la ruta nacional 127 y la provincial 2, donde ayer ocurrió la tragedia, es un lugar propicio para los choques. La ausencia de señalización, siquiera de reductores de velocidad, y el intenso tráfico de carga suman ingredientes para que se produzca un accidente.
La 127, que corta la provincia de norte a sur, es transitada por camiones de carga y micros que buscan evitar la 14: pretenden, sobre todo, escapar a los peajes y los controles policiales. Hasta no hace mucho, la ruta 2 era un camino de ripio, y cuando fue asfaltada nunca se pensó en hacer una rotonda, según afirmó Elidia Subieta, ex presidenta de Junta de Gobierno de Los Conquistadores. “Es un lugar casi sin luz, sólo con algún que otro reflector de unos puestos al costado del camino”, detalló Subieta. La funcionaria señaló que las autoridades locales “habían pagado para iluminar la zona, pero la empresa contratada no hizo los trabajos. Por ese tema hay una causa abierta”.
Los pobladores conocen bien el peligro del cruce y, aunque no hay señalización, saben del cuidado que deben tener: “Reducir la velocidad es lo lógico para quien conoce la zona”, explicaron habitantes de Chajarí, la localidad cercana más importante. Por ese motivo, saben que casi siempre los choques son protagonizados por ocasionales visitantes o camiones de carga, que en general van o vienen de Brasil y Paraguay.
La mala condición de la ruta, muy deteriorada, no impide que los vehículos transiten a alta velocidad. Luego de varios accidentes de automóviles, las autoridades locales habían construido reductores de velocidad, los denominados “pianitos” y “lomos de burro”, pero en poco tiempo fueron destruidos, justamente, por los camiones de carga y los micros de larga distancia.