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La lectura del fallo se hizo en la sala del sexto piso del Palacio de Tribunales, en Talcahuano 550. Como nunca antes a lo largo de la audiencia, el lugar estaba completo, por la presencia de familiares y periodistas. Por razones de espacio, o de seguridad para evitar eventuales problemas, los familiares y amigos del portero Jorge Mangeri, que se hicieron presentes en gran número, siguieron las incidencias desde un lugar contiguo, a través de una pantalla gigante. Mientras los familiares de Angeles Rawson salían tratando de evitar, sin éxito, la presencia de la prensa, los allegados al portero corrían a los periodistas para expresarles su rechazo al fallo: “Esto es una vergüenza, fue una causa armada, no hubo prueba de ADN, no hubo nada”, afirmaban de viva voz.

La defensa a ultranza del único imputado comenzó temprano, en boca de su abogado, Adrián Tenca, quien como se recordará intentó sin éxito la recusación de los jueces del Tribunal Oral Nº 9, en un último esfuerzo por evitar el juicio oral. Ayer, antes de que se leyera el fallo, planteó varias nulidades que fueron rechazadas por los miembros del tribunal. Tenca insistió en que su defendido es “inocente” y anticipó que recurrirá el fallo condenatorio.

Los familiares y amigos del portero rodearon ayer a su mujer, Diana Saettone, y a un hermano de Mangeri que se despidió de los periodistas con una frase expuesta a los gritos: “Esto fue una farsa, una mentira, acá condenaron a un inocente”. Los amigos de Mangeri, sin identificarse, pero con una firmeza cercana a la furia, aseguraron: “En este país no hay justicia, todos los jueces están comprados; es vergonzoso lo que hicieron con una persona que es totalmente inocente y que es condenada sin ninguna prueba. Sólo hubo indicios y con indicios no se puede condenar a nadie”.

Diana Saettone, la mujer de Mangeri, que siempre estuvo al frente de la defensa pública de su marido, ayer fue constantemente rodeada por sus allegados y en todo momento evitó hacer declaraciones. “Cómo va a hablar, pobre mujer, si además de condenarlo al esposo, a su compañero de toda la vida, ahora la quieren investigar a ella. Esto es una vergüenza”, insistió un hombre de unos 50 años que parecía llevar la voz cantante dentro del grupo.

El que sí habló con los periodistas fue Adrián Tenca, quien se hizo cargo de la defensa de Mangeri luego de la renuncia del primer abogado que tuvo el portero, el mediático Miguel Angel Pierri. La renuncia de Pierri se produjo poco después de que su hijo de 5 años, quien lo acompañaba durante una entrevista en la TV, lo corrigió en el aire cuando él dijo que Mangeri era inocente. “El fue el que mató a Angeles”, le dijo el niño a su papá.

Ayer, Tenca consideró que “era esperable este fallo, yo había recusado a este tribunal porque cuando aceptaron la prueba tuvo una parcialidad manifiesta”. El abogado afirmó que éste fue “un juicio donde surgió la verdad, que mi defendido era inocente, más allá de que el tribunal no lo haya querido ver”. Rodeado de amigos y familiares de su representado, dijo que ahora esperan “que más adelante la Justicia sea más objetiva de lo que resultó este tribunal”. Tenca anticipó que apenas conozca los fundamentos presentará un recurso de revisión de la sentencia ante la Cámara Federal de Casación. “Estoy convencido de que las pruebas contra mi cliente son nulas y estoy seguro de su inocencia.”