SOCIEDAD › LO QUE SE VIENE EN EL CASO GARCIA BELSUNCE
Un futuro más que incierto
Por R. K.
La carrera del juez Diego Barroetaveña está en la picota. Pese a que se decía que la Corte Suprema lo iba a sancionar, ello no ocurrió. Tal como lo adelantó Página/12, el máximo organismo resolvió tomarse su tiempo y analizar si el juez tiene razón o no. Por lo tanto, le pidió a la Procuración, que es la jefatura de los fiscales, que dentro de los próximos diez días exponga su postura. El procurador Eduardo De la Cruz es un firme defensor del fiscal Molina Pico y es seguro que dirá que el juez incurrió en varios delitos y, por lo tanto, debe iniciarse el proceso del jury para su destitución. También la Corte le pidió al camarista Fernando Maroto, que le haga conocer las razones por las que intervino en el caso exigiéndole al juez que detenga a Carrascosa, y por qué considera que Barroetaveña incurrió en desobediencia. Maroto entregará sus fundamentos antes del 28 de abril. Por último, el propio Barroetaveña tiene que enviar a la Corte las explicaciones de su actuación, algo que ya empezó a hacer ayer y el jueves en dos escritos. Con todos esos elementos en la mano, el máximo tribunal tomará una decisión.
En los pasillos de La Plata se corren, como siempre, distintas versiones. Por un lado están quienes dicen que la suerte de Barroetaveña está sellada y que a principios de mayo la Corte se inclinará por poner en marcha el proceso de destitución. Otras voces, en cambio, dicen exactamente lo contrario: si Barroetaveña se jugó como se jugó, poniendo en riesgo su carrera, es porque tiene respaldos y, además, elementos para demostrar las irregularidades en la investigación de Molina Pico.
Precisamente el fiscal también está en la picota. El juez aceptó el pedido de recusación que presentaron los García Belsunce y decidió apartarlo de la causa. No significa que la causa vuelve a fojas cero sino que debe designarse otro fiscal que seguirá adelante con el expediente. Los García Belsunce sostuvieron en su alegato que Molina Pico actuó en forma parcial, que no llamó a declarar a los testigos que –según ellos– ostensiblemente mintieron en la causa y tampoco a los peritos que realizaron varios trabajos, cuyas conclusiones –siempre según la familia– fueron manipuladas por el fiscal.
La resolución de apartar al fiscal será apelada el próximo martes por Molina Pico y el litigio quedará en manos de la Cámara de Apelaciones de San Isidro, integrada por Fernando Maroto, Margarita Vázquez y Emilio Rodríguez Mainz. En una oportunidad anterior, dos de estos jueces votaron en contra de apartar al fiscal, de manera que es probable que vuelvan a hacerlo ahora. Esto llevará a un proceso ya insufrible de apelaciones.
La otra decisión del magistrado es que rechaza la elevación a juicio del caso García Belsunce. Esto significa que la investigación debe continuar y el juez no acepta el criterio del fiscal, que la da por terminada sindicando a Carrascosa como autor y considerando que el motivo del crimen fue una pelea por fondos originados en el Cartel de Juárez. El juez considera que todavía falta mucho para encontrar a los culpables.