SOCIEDAD
“Apuestan a que los chicos se formen”
Por Mariana Carbajal
“El sacrificio por mantener a los hijos en la escuela privada no es una cuestión de status o distinción sino una protección de la identidad de clase”, afirma la socióloga Ana Wortman, investigadora del Instituto Gino Germani, quien en los últimos tres años estudió las identidades sociales y los consumos culturales en los sectores medios.
En las entrevistas que se realizaron durante la investigación, Wortman percibió el interés de los sectores medios “por invertir” para que sus hijos tuvieran una buena educación y como consideran que la pública –donde ellos se formaron– ya no es sinónimo de calidad, pagan un colegio privado a costa de destinar parte de sus ingresos y llegar a “sacrificar el confort de vivir en una casa más grande”. El mismo fenómeno lo observa en su vida cotidiana: “Conozco gente que ha decidido seguir viviendo en un departamento de dos ambientes y mandar a sus hijos a la escuela privada”. No ocurría lo mismo –recuerda– tres décadas atrás. “Era al revés. Como había cierta estabilidad económica, una familia mandaba a sus hijos a la escuela pública –que en ese momento tenía buen nivel– y ahorraba para tener la casa propia. Ahora no es así. Como en realidad no se puede tener nada, entonces, apuestan a que los chicos se formen. Apuntan a lo que Bourdieu llama el capital simbólico: que tengan recursos para vivir y ser creativos en la vida”, señala Wortman.
En la investigación de los consumos culturales de los sectores medios, quedó en evidencia la información que los entrevistados de la Capital Federal tenían de los espectáculos gratuitos. “Parecía que tenían la cartelera en la cabeza sobre todo lo que podían hacer y ver en la ciudad, tanto ellos como sus hijos –apuntó Wortman–. Nos llamó la atención porque por la situación socieconómica podría suceder que la gente no fuera a ningún lado por estar deprimida. No hay un peso, no hay esperanza, no hay nada, pero hay algo del patrimonio intangible que sigue existiendo, que es una marcha de identidad de clase también, aun en este momento de movilidad social descendente.”