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Días atrás, gran cantidad de medios se hizo eco de la publicación por parte de las nuevas autoridades de la Provincia de Buenos Aires de la “herencia recibida” en materia de deuda, con una cifra que impacta: algo más de 122 mil millones de pesos. Además contenía un buen desagregado sobre cómo se componía ese monto.

Para no tomar esa cifra como algo suelto en medio de tanta información, parece adecuado hacer algunas comparaciones tomando como ejemplo la situación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La deuda exacta de la Provincia de Buenos Aires al 31/12/15 es de 122.084,8 millones de pesos. Esto representa el 36 por ciento del total de los recursos esperados según el Presupuesto General de la Provincia para 2016. En tanto, la Ciudad Autónoma tiene al 31/3/16 (datos disponibles en su página web, no aparecen al 31/12/15) una deuda de 34.747,6 millones de pesos. Parece mucho menos pero si también la comparamos con su presupuesto de recursos 2016, da una cifra bastante similar: 31 por ciento.

Aproximadamente las mismas proporciones se mantienen si medimos la deuda en dólares: 9362,3 millones en la provincia al 31/12/15 y 2347,8 millones en la Ciudad al 31/3/16.

Otro dato interesante que entregó la Provincia es el relacionado con la composición del endeudamiento. En primer lugar, consignan que el 57,9 por ciento de la deuda pública estaba denominada en monedas extranjeras y el resto en pesos. Observando los datos de la Ciudad ya comienzan a mostrarse un poco más complicados: el 89,3 por ciento es en moneda extranjera, que se convierte en alrededor del 95 por ciento si se cuentan los bonos en pesos atados al valor del dólar.

Por otra parte, consignan que el 44 por ciento de la deuda vence en más de 5 años, 41 por ciento en un plazo de entre 1 y 5 años y el 15 por ciento vence en el corriente año. En la Ciudad, las cifras de corto plazo son significativamente preocupantes: en los 9 meses que restan de 2016 vence el 22,8 por ciento del total y nada menos que 76,6 por ciento lo hace entre 1 y 5 años, porque las obligaciones a más de 5 años representan apenas el 0,6 por ciento del total.

Por último, según los datos informados, más de un tercio de la deuda de la provincia tiene como acreedor al gobierno nacional, con la ventaja que esto significa a la hora de sentarse a negociar, mientras que en la Ciudad no parece haber nada. Estos datos llevan a pensar que si el gobierno de la Provincia de Buenos Aires recibió una “pesada herencia” en materia de deuda, lo mismo o peor le ocurrió al Jefe de Gobierno entrante de la Ciudad Autónoma, Horacio Rodríguez Larreta. Extrañamente, éste no se ha quejado.

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