DICCIONARIO
Canchero:
término del lunfardo que refiere a la persona de cancha. Aquel o aquella que tiene completo dominio del juego o del partido.
Ese que se las sabe todas, “el niño que todos llevamos dentro”, el argentino pícaro, el que “lo ata con alambre”, el chongo de pura cepa aunque también el gauchito. Parece que para ese único hombre, muchachas –y muchachos–, se ha popularizado el acceso a Internet. ¿Advirtió que todas las publicidades de Internet están dirigidas a hombres? ¿Y las mujeres? ¡Fácil! A ellas se las “baja” por la web, se cambian con un golpe de clic o se las avanza en el primer encuentro post-chat. No se explica por qué se han esmerado tanto los publicistas argentinos en vender ese producto a un ejército de nerds montados a caballo, a jóvenes productivos que pasan horas mimetizados con la trama profunda de un juego de rol cuyos contrincantes cuentan un mono, un vikingo y hasta ¡un “hombre invisible”!. ¿Pensarán los “creativos” que las mujeres no están aptas para la práctica del doble clic, considerarán que en el mundo sólo hay hombres, serán socios de un negocio secreto? ¿Responderá a algún estudio de mercado? ¿O serán sólo hombres –las mujeres con actitudes machistas también cuentan– los que ocupan los puestos de poder? Vamos, muchachos, no hace falta exagerar, que de la crisis de la masculinidad se sale, y hasta mejor parados.