Después de doce días de huelga -que ya suman 26 en lo que va del año-; y marchas masivas a la Legislatura y la Casa Gris desde aquel 24 de agosto cuando estalló el conflicto por una jubilación digna, los docentes estatales volverán hoy a clases. Amsafé resolvió anoche acatar la conciliación obligatoria con el gobierno de Jorge Obeid en una asamblea provincial en la que votaron más de 26.000 docentes: 18.057 por suspender el plan de lucha y 7.948 por seguir con los paros de 72 horas semanales por tiempo indefinido. Los que promovían el regreso a las aulas ganaron esta vez por más de 10.000 votos. "Esto es sólo una retirada estratégica del gremio para fortalecerse y volver a generar la alianza comunitaria que nosotros siempre hemos tenido con el conjunto de los padres y la sociedad, así que simplemente es una medida táctica", la definió el líder de Amsafé, José María Tessa.

Alredor de las 19 comenzaron a registrarse en la pizarra el resultado de las votaciones en los departamentos. Y casi dos horas después, Tessa informó sobre el escrutinio final. "Amsafé ha suspendido el plan de lucha por una abrumadora mayoría: 18.057 docentes votaron por la suspender las medidas de fuerza y 7.948 por continuar con los paros de 72 horas semanales por tiempo indefinido. Es decir, que mañana (por hoy) hay clases", explicó.

En la mayoría de los departamentos ganó la moción conciliadora, excepto en Rosario, donde 4.847 maestros se pronunciaron por profundizar el plan de lucha y 2.001 por suspenderlo. El resultado refleja unos 2.000 votos menos que en la asamblea anterior que prolongó la huelga. La contracara se expresó en La Capital, donde 3.819 maestros votaron por levantar los paros y 550 por rechazar las negociaciones con la ministra de Educación, Carola Nin.

Tessa dijo que el gremio acatará la conciliación obligatoria que convocó el secretario de Trabajo de la provincia, Alberto Gianeschi. Pero pondrá como condición que el gobierno cese con las amenazas de descontar los días de huelga y Gianeschi archive las actuaciones administrativas que alientan las represalias contra el gremio. "Lo primero que vamos a pedir es que terminen las amenazas de no pagar los días de paro. Ya lo advertimos, si se producen los descuentos se generaría un conflicto muy grande".

"Vamos a ir tanto a la Secretaría de Trabajo de la provincia como al Ministerio de Trabajo de la Nación a plantear esta situación: nosotros queremos que se archiven las actuaciones (que inició Gianeschi) para que queden pendientes ninguna medida administrativa, política, jurídica que pueda vulnerar el derecho de huelga y los derechos de Amsafé como organización gremial", explicó.

-¿La decisión de suspender el plan de lucha significa una tregua? -le preguntaron.

-No sé por qué hablan de tregua. Sólo suspendemos las medidas de fuerza.

Esto significa que a partir de mañana (por hoy) nos sentaremos a dialogar con las autoridades provinciales para discutir lo que nosotros venimos planteando y que no bajamos de ninguna manera (la jubilación docente a los 55 años las mujeres y 60 los hombres con 25 años de servicio y el 82 por ciento móvil del sueldo en blanco). Sólo se trata de una retirada estratégica del gremio para fortalecerse y volver a generar la alianza comunitaria que nosotros hemos tenido: el apoyo del conjunto de los padres y de la sociedad que queremos seguir teniendo. Así que esto simplemente es una medida táctica", insistió Tessa.

-¿Un retroceso?

-No es un retroceso. Ahora se abre una instancia de discusión. Nosotros ya planteamos la semana pasada que había que generar un ámbito de discusión con el gobierno para resolver las cuestiones y avanzar progresivamente en nuestras reivindicaciones, entre ellas la jubilación docente.

-Entonces, ¿quiénes impulsaban la continuidad de los paros y el plan de lucha estaban equivocados?

-No, yo no hablo de equivocación, de ninguna manera. Reconozco la honestidad intelectual y política de todos los compañeros que participan de nuestra organización, cada uno plantea las medidas que les parece más conveniente y avanzamos en esa dirección. La semana pasada se votó una cosa (ratificar la huelga y rechazar la conciliación obligatoria) y nosotros asumimos la posición de la asamblea en forma clara y contundente. Esta semana se votó otra (suspender el plan de lucha y negociar con el gobierno) y también acatamos esa decisión soberana de los maestros --concluyó Tessa.