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Carrió dijo que le "encantaría" que Cobos "pueda acompañar alguna vez a los candidatos" del Acuerdo Cívico, pero también le exigió que "tenga cuidado con algunas conductas que puedan generar confusión en el electorado".

El reclamo de Carrió tiene lugar tras la foto que se sacó el vice con el postulante de Unión PRO Francisco De Narváez, que generó una discusión interna y puso en riesgo la continuidad de la alianza entre el cobismo, Coalición Cívica y el radicalismo.

En ese contexto, advirtió que "no sería capaz de sacarme una foto con un candidato de otro partido, porque generaría confusión; si me saco una foto con Cristina Kirchner o con Carlos Reutemann, eso sería confusión electoral", dijo la candidata.

Por otra parte, la referente ubicó al ACyS como la "única alternativa que garantiza la paz" tras las elecciones en el distrito bonaerense ya que, según pronosticó, si "sigue la lucha en el PJ va a ser violenta".

Así, la ex radical volvió a diferenciarse tanto de la lista que encabeza el ex presidente Néstor Kirchner, por el Frente Justicialista para la Victoria y del sector disidente de Unión PRO, que lleva como postulantes a De Narváez y al ex gobernador Felipe Solá.

"Con que De Narváez me regale una gigantografía, gano Latinoamérica", ironizó la referente sobre los gastos de campaña que está realizando el empresario bonaerense y alertó que "hay mucho dinero" invertido en la provincia para el proselitismo.

Carrió encabezó una actividad en un bar del barrio de Palermo, donde presentó las propuestas para el área de Salud, acompañada por los aspirantes a diputado Ricardo Gil Lavedra y Enrique Olivera.

Para la chaqueña, "la salud en la Argentina se ha convertido en el gran negocio de los sindicatos" y se quejó de que "tenemos pésimas obras sociales, hospitales pobres y sindicalistas millonarios".

Por eso, alertó que "hoy nuestro modelo de salud es el dengue, la gripe, la tuberculosis y el mal de Chagas", agregó.