"Me parece una preocupación razonable" declaró Calderón en una entrevista al diario Folha de Sao Paulo, cuyos principales párrafos fueron recogidos por ANSA.

Colombia "debería establecer mecanismos que garanticen que su política de seguridad democrática, incluso la cooperación que recibe de Estados Unidos, no represente peligro ni amenaza para ninguno de los países vecinos" añadió.

El gobierno brasileño demandó a Colombia que asuma un compromiso legal que prohíba el desplazamiento de tropas estadounidenses más allá del territorio colombiano.

Calderón concluyó ayer su primera visita de Estado a Brasil, durante la cual mantuvo una reunión reservada junto a Lula da Silva.

Al término del encuentro los mandatarios manifestaron sus coincidencias respecto del golpe de Estado en Honduras pero no hicieron referencia a Colombia.

"Respeto la decisión de Colombia, pero no creo que sea un modelo, por lo menos para México, lo que exigimos de los norteamericanos es parar el tráfico de armas y reducir el consumo de drogas allá con políticas activas, de dos años a esta parte la cocaína cuesta más del doble", enfatizó Calderón.

En ese sentido, agregó: "Nunca admitimos ni admitiremos actividades de ningún tipo de los norteamericanos en nuestro territorio, no podemos olvidar que México es la frontera de Estados Unidos con América Latina".

El mandatario mexicano concluyó en Brasilia una gira suramericana que incluyó a Colombia y Uruguay.