Al participar del encuentro anual de la ONU, Lula reiteró su alerta "para garantizar la inviolabilidad de la misión diplomática en Honduras", donde encontró refugio el depuesto mandatario Zelaya y que se encuentra acosada por las fuerzas militares hondureñas.

"Sin voluntad política (internacional) continuarán proliferando golpes de Estado como el que derrocó al presidente constitucional de Honduras, José Manuel Zelaya, que se encuentra desde el lunes refugiado en la embajada de Brasil en Tegucigalpa", dijo.

Lula fue el primer presidente en hacer uso de la palabra, tras el secretario general Ban Ki-moon, respetando una tradición de la ONU.

"La Comunidad internacional exige que Zelaya reasuma inmediatamente la presidencia de su país y debe estar atenta ante la inviolabilidad de la misión diplomática brasileña en la capital hondureña", añadió, según reprodujo un despacho de la agencia ANSA.

Tegucigalpa atravesó ayer una jornada marcada por la violencia en sus calles, a partir de la decisión del gobierno de facto de impedir una manifestación de apoyo al presidente derrocado, Manuel Zelaya, y las exhortaciones al diálogo para zanjar la crisis desatada tras el golpe de estado del 28 de junio último.