En la presentación del plan, en la Biblioteca Nacional, Garré llamó a la sociedad a involucrarse en la prevención del delito y advirtió que "el éxito de estas políticas está en que, en el ámbito de sus responsabilidades, cada actor de Gobierno del nivel que se asuma como un imperativo ético y político gestionar con responsabilidad".

El programa fue desarrollado por el equipo que coordina la secretaria de Políticas Públicas de Prevención y Relaciones con la Comunidad, Ileana Arduino y "se propone algo sencillo, efectivo y de fondo: escuchar a la gente, conformar espacios orgánicos para que la comunidad participe activamente en la elaboración y control de las políticas públicas en Seguridad", resumió la ministra de Seguridad.

Además, indicó que "estos espacios, serán instancias para pensar, discutir y buscar acuerdos alejados de las simplificaciones, las frases hechas y las falsas soluciones mágicas".

La ministra aprovechó para enviarles un mensaje a los uniformados: "El principal enemigo de los miles de hombres y mujeres honrados que hacen su trabajo, arriesgan su vida y se encuentran envueltos injustamente en la sospecha y la desconfianza no es el pueblo, sino la falta de transparencia que permite que quienes hacen mal su trabajo consigan impunidad a costa del prestigio de sus compañeros y de la institución en su conjunto".

Garré llamó a elaborar "verdaderas cartografías" de prevención mediante denuncias de ciudadanos, pero se diferenció de la intención que tuvo el candidato a gobernador bonaerense Francisco De Narváez, cuando hizo un mapa del delito con reportes de vecinos que no condecían con denuncias oficiales.

"Proponemos elaborar en cada caso verdaderas cartografías de prevención que den relevancia a la capacidad de diagnóstico que la comunidad tiene en relación con la violencia y el delito. No se trata de un mapa virtual, que no conduce más que a colorear un espacio cibernético del que nadie se hace cargo", apuntó. Y adelantó que "las comisarías van a ser sometidas a un sistema de monitoreo a los efectos de ver cómo el mapa del delito va corrigiéndose en forma favorable, o sea disminuyendo la conflictividad".

El programa guarda similitudes con el de los "foros de seguridad" que había armado el jurista León Arslanian cuando fue ministro de Seguridad bonaerense, antes de la llegada de Daniel Scioli a la gobernación.

La ministra explicó que las mesas "estarán compuestas por representantes de organizaciones comunitarias e instituciones de reconocido trabajo social, deportivo y cultural en el barrio" y que en Ciudad de Buenos Aires, donde el plan tendrá su bautismo, las mesas estarán ubicadas en cada una de las 53 jurisdicciones de las comisarías de la Policía Federal.

Además, resaltó que debe haber un debate del rol de las fuerzas de seguridad y anunció convenios con la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo y la Facultad de Sociales de la UBA.

Antes del lanzamiento del programa, desde el ministerio explicaron que "hay unas mil quinientas OSC cuyo trabajo, en algún punto, tiene vinculación con temas relacionados con la seguridad", de los cuales "más de 600 ya fueron contactadas, y a partir del anuncio muchas otras se acercarán para participar".

Por otra parte, Garré minimizó la decisión del gobierno porteño de incorporar a oficiales de la federal desafectados por la cartera que encabeza la semana pasada, y dijo que "es una opción que tiene la Policía Metropolitana". Algunos de los agentes separados de la fuerza son investigados por casos de corrupción.

Finalmente, sobre el documento firmado por algunos miembros de la oposición acerca de un supuesto riesgo que atraviesa la democracia, la funcionaria nacional sostuvo que es "un dislate" y señaló que "está tan consolidada, afortunadamente, nuestra democracia que hablar de eso me hace pensar en que no hay temas importantes en la agenda de la oposición".