Carlotto se convertirá en la primera mujer en recibir la distinción por parte del bloque regional, que en 2008 reconoció al escritor Eduardo Galeano. La titular de Abuelas reconoció que su exposición tiene que ver con su "personalidad: actúo, hago, digo y pienso, y parezco la sabia de la película, pero no lo soy. Soy una mujer que dio su vida para luchar y que lo seguirá haciendo hasta que tenga vida. (...) Es la obligación que tenemos los de nuestra generación, que fuimos muy responsables de todos los golpes de Estado, por no reaccionar como cuando nos quitaron a nuestros hijos. Hay que hacer del Nunca más una realidad en la Argentina", agregó.

Acerca del reconocimiento indicó que "no hay mejor premio que encontrar a un nieto", y que lo que necesita su agrupación es "reconocimiento, apoyo, solidaridad y respeto de la gente. Este premio es emblemático por el lugar donde se otorga y el contexto socio-político" que atraviesan los países de la región. "Es un reconocimiento a una institución que está nominada nuevamente para Premio Nobel de la Paz. Se trata simplemente de mujeres, que dejamos de hacer lo cotidiano y hace 34 años que estamos caminando, con fuerza, respeto, amor y en paz", sostuvo.

Carlotto, luego de un breve encuentro con el ministro de Economía y candidato a la vicepresidencia por el kirchnerismo, Amado Boudou, celebró su elcción como compañero de fórmula de Cristina Kirchner: "me parece muy acertada, porque se trata de una persona joven, a quien la Presidenta ya conoce".

Organizado por el Instituto Social del Mercosur, Carlotto encabezó una jornada de Derechos Humanos en el Tribunal Permanente de Revisión, donde descubrió una placa en el Auditorio de Derechos Humanos y expuso acerca de la experiencia del Banco Nacional de Datos Genéticos. Entre sus actividades, Carlotto visitó ayer dos espacios para la memoria: un excentro clandestino de detención de la Policía paraguaya, "siniestro, kafkiano, impactante", y la exresidencia del dictador Alfredo Stroessner. "No nos olvidemos que acá se refugiaban los apropiadores de nuestros nietos, que después fueron extraditados. Ahora tenemos que esperar la del represor Norberto Bianco", señalado como jefe médico militar de la maternidad clandestina que funcionó en el hospital militar de Campo de Mayo durante la última dictadura militar.