El plan establece una quita de 21.600 millones de euros a las regiones, introduce una reducción del 5 por ciento de las pensiones mayores de 90 mil euros al año y aplica un plan de copago en la sanidad.

El copago en la sanidad que introdujo el plan hará que los italianos tengan que pagar un mínimo de 10 euros para visitas con médicos especialistas y análisis, así como de 25 euros en los servicios de urgencias con el código blanco, es decir, sin gravedad.

Además, se dispuso el pago de una tasa sobre los depósitos bancarios que será de 34 euros hasta los 50 mil euros, de 70 euros hasta los 150 mil y hasta llegar a los 1.100 que tendrán que pagar quienes tengan más de 500 mil euros.

Italia tiene una deuda pública superior al 120 por ciento de su PBI, aumentó de 47 mil a 79 mil millones de euros la cantidad a recaudar con las nuevas medidas de su plan de ajuste.

El ministro de Economía, Giulio Tremonti, definió que "la salvación no llega desde las finanzas, sino desde la política. Pero la política no puede cometer errores, también porque es como con el Titanic: no se salvan ni siquiera los pasajeros de primera clase".

Por este motivo, el funcionario abogó por introducir en la Constitución una "regla de oro" que exija el equilibrio de las cuentas públicas. Luego de la aprobación, expresó: "Nuestro trabajo no termina hoy. Juntos, mayoría y oposición, tendremos que introducir en nuestra Constitución la regla de oro del equilibrio de las cuentas", agregó.