"Primero nos reprimieron y ahora nos persiguen", denunció Marcelo "Nono" Frondizi, delegado de los Talleres Protegidos de la Ciudad de Buenos Aires, al recordar la violenta jornada de abril, cuando la Policía Metropolitana ingresó en el predio con el objetivo de asegurar la demolición de las instalaciones, que provocó más de 50 heridos.

El legislador Francisco Tito Nenna (FpV), por su parte, aseguró que "les damos nuestra solidaridad a todos los pacientes por lo que ocurrió en forma terrible y perversa durante la gestión de (Mauricio) Macri". En el marco de la jornada denominada "Nunca más en el Borda", Nenna consideró que los terrenos de ese neuropsiquiátrico "tienen que tener una función social y no estar para negocios inmobiliarios".

Para la diputada María Elena Naddeo (Frente Progresista Popular), "es muy importante que se mantenga la unión y la solidaridad en los equipos de salud mental". "Estamos esperando el fallo judicial que ratifique definitivamente la paralización de la obra", agregó Naddeo, quien expresó la necesidad de "generar conciencia social e instalar en el debate público que el predio del Borda no es el lugar apropiado para un centro cívico" y denunció que "Macri está vendiendo una ilusión, una ciudad que no existe, y un proyecto nacional que es absolutamente ineficaz y mentiroso".

En tanto, Alejandro Bodart (Nueva Izquierda), anunció que hay una ley con 36 avales en la Legislatura porteña para que no puedan poner "ni un ladrillo más en el centro cívico, que es una punta de lanza para terminar arrasando con todos los hospitales en pos de un negocio inmobiliario".