Tanto el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), como la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), en los que se enrolan respectivamente los trabajadores de GM y Peugeot, atribuyeron la situación a la caída de las ventas en el mercado interno y en Brasil, principal destino de las exportaciones del sector. El secretario adjunto de SMATA, Antonio Milici, afirmó que "la merma de producción en la planta industrial de General Motors es crítica y el gremio se mantiene en estado de alerta".

En declaraciones a la radio LT8 de Rosario, el dirigente gremial señaló que "el 79 por ciento de la producción de General Motors va a Brasil, y si descienden las ventas en el país y Brasil deja de comprar, vamos a estar realmente complicados". El gremialista precisó que "el problema es que en el primer semestre del año pasado se fabricaban 34 vehículos por hora, luego se bajó a 29 en el segundo semestre, que es la misma cantidad que se produce ahora, y si la producción desciende aún más tendremos que reunirnos (con la empresa) y ver las alternativas posibles para sostener el trabajo", concluyó.