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"Esta mañana, tras una sesión maratónica, el Congreso aprobó el cambio del sistema binominal, un anhelo tan esperado y tan necesario para renovar la política en nuestro país", señaló la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, al inicio de la inauguración de un nuevo centro médico en Santiago. En esta línea, la mandataria agregó que “tener un sistema como el que vamos a tener en nuestro país va a permitir una mejor representatividad y tener más y mejores ideas en el parlamento, creo que es otra buena cosa que podemos celebrar".

Por su parte, el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, señaló que “la jornada fue histórica, esto permite dar un salto tan importante y terminar con un sistema electoral único en el mundo, reconocer nuevamente el esfuerzo de los senadores y también de los expresidentes". En esta misma línea, la presidenta del Senado, Isabel Allende, manifestó que "nos sentimos tremendamente orgullosos de decir que hemos logrado algo histórico después de 25 años".

En el actual sistema electoral, cada distrito o circunscripción tiene la opción de elegir dos parlamentarios, que se distribuyen entre las dos coaliciones con más votos, salvo que una logre duplicar en votos (doblaje) a la segunda, obteniendo de esa manera los dos parlamentarios. Este formato de sistema electoral ha permitido a la derecha chilena mantener una fuerte participación en las Cámaras de Senadores y Diputados y de esa manera impedir reformas y cambios constitucionales que requieren de quórum calificado.

Con la nueva norma, cada región constituirá una circunscripción senatorial. Las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Atacama, Aysén y Magallanes elegirán 2 senadores; Antofagasta, Coquimbo, O'Higgins, Los Ríos y Los Lagos, 3; y la Metropolitana, de Valparaíso, Maule, Biobío y La Araucanía tendrán 5 representantes cada una. De esta forma se aumentará de 120 a 155 el número de diputados y de 38 a 50 el de senadores.

El proyecto impulsado por el Gobierno se aprobó con 24 votos a favor, tres en contra y siete abstencione. Ahora, la iniciativa pasará a su tercer trámite, donde la Cámara de Diputados deberá ratificar los cambios introducidos por el Senado, para que la ley esté lista para la promulgación de la presidenta Michelle Bachelet.