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Manzur sostuvo este mediodía que "el pueblo tucumano le ha dado la espalda" a la oposición que fue unida en la provincia y remarcó que "las alianzas no tienen buena experiencia en la Argentina". El gobernador electo contó que conversó con la presidenta, Cristina Kirchner, y los integrantes de la fórmula presidencial del Frente para la Victoria, Daniel Scioli y Carlos Zannini, además de una decena de mandatarios provinciales peronistas.

"El pueblo nos dio una gran responsabilidad, ya que ganamos en la provincia de Tucumán por más de 100 mil votos", enfatizó en una conferencia de prensa.

Consultado sobre las irregularidades denunciadas en la jornada electoral, respondió que "es un tema delictivo y ya están todas las denuncias respectivas". Reconoció que algunos hechos de violencia fueron producto de "peleas entre los propios peronistas, lo que nos avergüenza".

El candidato del FpV repudió los casos de violencia que se registraron durante los comicios y señaló que "son situaciones delictivas que tienen que ver con lo policial y ya se hicieron las denuncias en la Justicia para que investigue y juzgue a los responsables". "Todos saben que en Sargento Moya un candidato de la oposición quemó las urnas, pero está identificado y detenido", señaló en referencia a Hugo Alarcón, uno de los cuatro detenidos en esa localidad ubicada a unos 50 kilómetros al suroeste de la capital.

Sobre las denuncias realizadas por la oposición, que llegó a pedir la suspensión del escrutinio provisorio, Manzur opinó que "quisieron embarrar una elección transparente haciendo cosas feas, pero lo único que consiguieron fue hacernos quedar mal a todos los tucumanos, algo que el pueblo de esta provincia no se merece". "Están perdiendo y no tuvieron mejor idea que denunciar, algo que ya hicieron durante la campaña" insistió el candidato ganador.

El mandatario provincial, José Alperovich, por su parte, minimizó las denuncias realizadas por los dirigentes del Acuerdo para el Bicentenario, al sostener que "si bien hubo problemas en 40 urnas, no representan ni el uno por ciento de las casi 3500 que fueron habilitadas". "Sucedió en Los Ralos, Sargento Moya y en San Pablo; por eso, pedimos que allí se realicen elecciones complementarias", agregó durante una conferencia de prensa, en la que estuvo acompañado por Manzur.

Al mismo tiempo, Alperovich señaló que "si la oposición y la junta electoral quieren abrir todas las urnas, que lo hagan, porque lo que buscamos es la transparencia total de la elección".

Más temprano, durante su habitual rueda de prensa matutina, el jefe de Gabinete nacional, Aníbal Fernández, celebró el "claro triunfo de Juan Manzur” y desestimó las denuncias al asegurar que el balance de los comicios era el "normal de cualquier provincia argentina”. Sin embargo, reclamó que se detuviera a quienes estuvieron involucrados en la quema de las urnas o en los otros incidentes, aunque indicó que "las denuncias de fraude y el pedido de reapertura de urnas es para encarajinar la situación, nada más: es la queja de los que pierden, nada más".

Por su parte, el candidato a gobernador de la alianza Acuerdo para el Bicentenario, José Cano, quien recibió el respaldo de la UCR, el PRO, Progresistas y el Frente Renovador, cuestionó al sistema electoral que se utilizó en los comicios provinciales, al que consideró "escandaloso" y anticipó que en el escrutinio definitivo "se confrontará cada telegrama con las planillas" que posee su fuerza.

"Una elección que debería haber sido una fiesta de la democracia, se vivió con tensión, con incidentes, gente detenida, urnas incendiadas y tiroteos", lamentó Cano en declaraciones a radio Uno, y consideró que el sistema electoral "nos da vergüenza como tucumanos".