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La Corte Suprema de Brasil abrió hoy una segunda investigación vinculada a un caso de corrupción contra el senador Aecio Neves, candidato presidencial derrotado en 2014 y titular del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), principal aliado del presidente interino Michel Temer. También ordenó investigar al alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes.

La decisión fue tomada por Gilmar Mendes, juez del Supremo Tribunal Federal, a pedido del fiscal general Rodrigo Janot, para determinar si Neves y Paes actuaron para esconder una red fraudulenta para financiar partidos políticos, se informó oficialmente. La investigación deberá determinar si Neves, cuando era gobernador de Minas Gerais en 2005, obstruyó a una comisión parlamentaria para evitar revelar movimientos en el Banco Rural, que habría participado en el financiamiento ilegal de campañas.

La denuncia fue hecha por el senador expulsado Delcidio Amaral, quien estuvo preso por intentar la fuga de un detenido en el caso de corrupción en Petrobras y en 2005 comandaba una comisión parlamentaria que investigó el 'mensalao', como se llamó a la red montada por parte del Partido de los Trabajadores para financiar a fuerzas aliadas.

Esta es la segunda investigación abierta contra Neves, ya que la primera apunta a determinar si estuvo vinculado a sobornos recibidos por parte de ilícitos en la empresa estatal de energía Furnas, ubicada en el estado de Minas Gerais. Neves, uno de los impulsores del impeachment a Rousseff, negó los cargos y dijo que espera que la investigación demuestre su inocencia.

En tanto, Janot pidió hoy a la Corte a captura del presidente del Senado y número dos del país, Renán Calheiros, del ex presidente José Sarney, del suspendido jefe de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, y del senador Romero Jucá, ex ministro del presidente interino Michel Temer, por interferir en las investigaciones de corrupción de Petrobras.

La situación afecta a la plana mayor del Partido del Movimientoo de la Democracia Brasileña (PMDB) y golpea directamente al círculo de poder del presidente interino. El pedido fue realizado luego de que Sarney, Calheiros y Jucá, hombres fuertes del PMDB y negociadores políticos de Temer, fueran grabados por el 'arrepentido' Sergio Machado, un funcionario corrupto confeso que presidió Transpetro, una subsidiaria de Petrobras.

Según Machado declaró al fiscal general Janot, en su condición de presidente de Transpetro, un cargo que pertenecía al PMDB en el acuerdo de gobierno con el Partido de los Trabajadores de Rousseff, de esa empresa pública desvió unos 20 millones de dólares para financiar campañas de sus correligionarios en el Senado. La grabación de Machado en su conversación con Jucá reveló que para el senador el juicio político a Rousseff era necesario para crear un "pacto" y detener el avance de la Operación Lava Jato, para proteger al PMDB y llevar a Temer a la presidencia del país.

Temer asumió el 12 de mayo en forma interina luego de que el Senado votara por suspender a Rousseff por 180 días en el proceso de juicio político. Dos días después de anunciar un nuevo gabinete, el senador Jucá debió renunciar al Ministerio de Planificación por la divulgación de los audios en los cuales expresaba que había hablado sobre la caída de Rousseff con generales del Ejército y con jueces de la Corte.

Los audios con Calheiros y Sarney indican que Machado, en su delación premiada, los consultaba -a propósito, con un grabador oculto- sobre qué actitudes tomar frente a la Operación Lava Jato, con lo cual el titular del Senado y el ex presidente hicieron comentarios indicando cómo actuar para proteger al partido.

El fiscal Janot consideró que Cunha, suspendido del cargo y procesado por supuestamente recibir sobornos y depositarlos en Suiza, también actuó con su posición como jefe de Diputados para salvar su pellejo en la Operación Lava Jato, que en primera instancia y para personas sin fueros investiga en Curitiba, capital del estado de Paraná, limítrofe con Misiones, el juez Sergio Moro.

Es la primera vez que un fiscal general pide la captura de un ex presidente como Sarney, que gobernó Brasil entre 1985 y 1990, pero debido a su avanzada edad la solicitud es que mantenga prisión domiciliaria, con una tobillera electrónica. También es la primera vez que el titular de los fiscales pide la detención de dos jefes del Poder Legislativo.

La situación institucional brasileña, con Rousseff apartada para el juicio político en el Senado, ubica a Calheiros, titular del Senado, como el número dos del país, debido a que Cunha está suspendido en el cargo. En caso de que Calheiros sea suspendido del cargo como pidió el fiscal general, el número dos en la línea de sucesión es el presidente del Supremo Tribunal Federal, Ricardo Lewandowski. Precisamente Lewandowski es quien debe llevar adelante la próxima etapa definitoria, en el Senado, del juicio político a Rousseff.