22:34 › OBAMA VISITó A LOS FAMILIARES DE LA MASACRE DE ORLANDO

"No podemos evitar todas las tragedias pero podemos frenar algunas"

El presidente Barack Obama se reunió en Orlando con sobrevivientes y familiares de las víctimas de la masacre de 49 personas en un boliche gay y dijo que Estados Unidos debe actuar para limitar la posesión de armas y combatir el extremismo, en una visita marcada por la indiferencia de los habitantes de la ciudad y el conmovido agradecimiento de los parientes de los muertos y los heridos.

El mandatario demócrata arribó exactamente a las 13,30 al imponente estadio Amway Center, propiedad del equipo de básquetbol de la NBA, Orlando Magic, y atendió individualmente durante dos horas a los familiares de cada una de las víctimas, acompañado por el vicepresidente Joe Biden. Luego se trasladó hasta el "parque de la memoria", a tres cuadras del lugar, frente a un gran shopping, donde descendió con un ramo de flores en sus manos, solo, y lo depositó en un improvisado altar popular.

Conmovido, el presidente aseguró que no se pueden prevenir todos los ataques de "lobos solitarios" como Omar Mateen, el estadounidense de 29 años autor de la masacre del sábado pasado en el estado de Florida, pero sí "limitar su capacidad de destrucción", regulando la venta de armas. "Los dos últimos ataques terroristas en nuestro territorio -Orlando y San Bernardino, California- fueron domésticos. No estuvieron planeados por grupos internacionales ni por complejas células. Tenemos que hacer más para prevenir esto, y tomará más que nuestras fuerzas armadas y nuestro aparato de inteligencia", advirtió Obama. "No podemos evitar todas las tragedias, no podemos borrar el odio y el mal de cada corazón en el mundo, pero podemos frenar algunas. Podemos salvar algunas vidas", agregó.

Mateen, un neoyorquino de religión musulmana e hijo de padres afganos, fue muerto por la policía luego de que se atrincherara varias horas en la discoteca Pulse con algunos rehenes. Durante el ataque llamó al 911 y se proclamó leal al grupo islamista Estado Islámico (EI), que a su vez reivindicó el hecho, pero tanto Obama como otras autoridades han dicho que no hay indicios de que actuara en coordinación con grupos extranjeros. Otra pareja, que también se declaró leal al EI, había asesinado a 14 personas en San Bernardino, California, en diciembre pasado.

La masacre de Orlando, la peor en la historia reciente de Estados Unidos, reabrió el debate sobre el control de armas en un país donde cada año ocurren cientos de matanzas a tiros, ya que Mateen pudo comprar legalmente el fusil que usó pese a haber sido investigado por el FBI durante 10 meses, hasta dos años antes del ataque.

"El argumento de que las víctimas en el boliche deberían estar igual de armadas que el atacante desafía el sentido común", dijo Obama. "Nuestra política conspiró para hacer lo más fácil posible que un terrorista o, simplemente, un individuo perturbado pueda comprar armas extraordinariamente poderosas. Y lo pueden hacer legalmente. Ese no es el sentido de la libertad", agregó Obama, quien luego visitó el Hospital Central donde se encuentran internados buena parte de los heridos.

Durante todo ese recorrido llamó la atención que solamente los medios de difusión fueron tras sus pasos, mientras que los eventuales transeúntes seguían inmersos en sus cosas y apenas si distraían sus miradas cuando escuchaban el ulular de los coches de policía y el sonido estentóreo de las motos de seguridad. Y si alguna manifestación hubo en torno de su presencia en la tórrida tarde de Orlando, con 39 grados, sol impiadoso y algunas nubes negras que provocaron una llovizna apenas perceptible, fue para no dejarlo muy bien parado, ya que, por ejemplo, un musulmán exhibió un cartel que rezaba: "Bienvenido al Estado de La Florida, presidente tirabombas".

Compartir: 

Twitter

 
ULTIMAS NOTICIAS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.