Varios policías que testimoniaron ante la fiscalía dijeron que entre los civiles había policías de la metropolitana, cuya inocencia defendió hoy el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, al sostener que sólo dispararon postas de goma.

Salgueiro y Chura Puña fueron asesinados en las inmediaciones del parque con munición de plomo calibre 12 compatibles con la que disparan las escopetas policiales o las armas caseras.

Abraldes le pidió a la Gendarmería Nacional nuevos estudios para establecer si esos proyectiles fueron disparados con algunas de las más de 250 armas policiales incautadas. En las modulaciones de la Policía Federal analizados por la fiscalía se escucha que la División Central de Operaciones de esa fuerza le pidió a la Metropolitana que no usara armas largas ni agresivos químicos, como gases lacrimógenos.