Jaua agregó que el gobierno recibió una llamada de un funcionario del Departamento de Estado, en la que se expusieron "exigencias". Esas "condiciones" fueron consideradas "inaceptables por el gobierno venezolano por ser considerada una intromisión en los asuntos internos de nuestro país", subrayó el ministro.

El gobierno expulsó anteayer lunes a tres funcionarios consulares de la embajada de Estados Unidos, a quienes acusó de financiar y organizar grupos para las protestas violentas. El canciller señaló que el gobierno venezolano "ha estimado tener informados a los miembros de la Celac sobre la gravedad de las acciones y exigencias formuladas por el representante del Departamento de Estado, lo cual constituye una amenaza no sólo a la independencia, seguridad y soberanía de Venezuela e instituciones, sino los principios defendidos por nuestra comunidad".

Del mismo modo, el embajador de Venezuela ante la OEA, Roy Chaderton, deploró la posición de medios de prensa estadounidenses ante la situación de protestas en Venezuela. El diplomático relacionó a la cadena de televisión CNN y al diario The Washington Post con un "montaje en redes sociales" y una campaña de desprestigio sobre la democracia venezolana. Chaderton expuso en una sesión ordinaria del Consejo Permanente de la OEA, en la que Estados Unidos y Canadá pusieron en el temario la situación de Venezuela para pedir al gobierno de Maduro que entable un diálogo con la oposición. El embajador venezolano apuntó a "la mafia cubano-estadounidense, al extremismo religioso norteamericano" y a otros sectores de presentar una imagen errónea de lo que sucede en la actualidad.

Mientras tanto, opositores venezolanos, convocados por la organización "Una voz para la democracia en Venezuela", pidieron fuera del edificio de la OEA que la organización condenara al gobierno de Maduro y reclamaron la convocatoria a elecciones en los próximos seis meses.