Los alumnos de la Universidad Nacional de Tucumán mantienen ocupadas diversas sedes de la casa de estudios, desde hace casi un mes. Pese a la continuidad de la protesta –que se realiza en reclamo de la declaración de la emergencia en violencia sexual y doméstica, la aplicación de un boleto estudiantil, y la reapertura de los comedores universitarios–, parte del estudiantado de Psicología retomó ayer las clases pero fuera de la sede, que sigue ocupada. Sin actividad continúan las facultades de Filosofía y Letras, Artes y Ciencias Naturales. En ese contexto, dentro de una medida de fuerza nacional (ver nota central), la Asociación de Docentes de la UNT (Adiunt) realiza un paro de 48 horas. Uno de los planteos centrales de los alumnos es la implementación del boleto estudiantil gratuito, pero el gobernador José Alperovich anunció que no afrontará su costo, calculado en 17 millones de pesos mensuales. Tampoco lo harán los propietarios de las empresas de ómnibus, según advirtieron.