Después de fracasar la asamblea del sábado, la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) volverá a intentar elegir a su presidente mañana, pero lejos de la ciudad: los representantes de los profesores, alumnos y graduados fueron convocados en una escuela agropecuaria dependiente de la UNLP, aunque ubicada a unos cuantos kilómetros, en la ciudad de 25 de Mayo.

Los estudiantes de la Federación Universitaria de La Plata lograron impedir la reelección al frente de la universidad de Gustavo Azpiazu, único candidato. La asamblea debía comenzar a las 8 del sábado, pero el ingreso al Colegio Nacional Rafael Hernández fue bloqueado por alumnos de agrupaciones de izquierda –unos 400, según los medios locales–. También se movilizó parte de la comunidad universitaria para apoyar la reunión de los 192 asambleístas. No hubo caso. La FULP insistió en que, antes de elegir al presidente, se definiera para la asamblea un temario que incluyera el inicio de una reforma estatutaria para “democratizar el cogobierno” de la institución donde estudian 92 mil alumnos.

“Es un mecanismo extorsivo”, acusó Azpiazu a los estudiantes. “La universidad tiene el compromiso de debatir una reforma al estatuto. Pero la discusión debe ser en forma democrática”, dijo. A la cabeza de la UNLP desde 2004, Azpiazu contaría con los votos necesarios para ser reelecto hasta 2010, gracias al apoyo de una coalición de radicales, peronistas e independientes.

Tras la suspensión, ayer hubo dos reuniones convocadas por la presidencia de la UNLP para resolver qué hacer. En un intento por recuperar el diálogo, primero las autoridades recibieron a la dirigencia de la FULP, conducida por un frente de izquierda que incluye a la CEPA (PCR), el PO, el Frente Popular Darío Santillán, el MST. Los estudiantes reiteraron su pedido: organizar una sesión del Consejo Superior para discutir la elección de tres decanos que ellos consideran irregularmente elegidos y para modificar el temario de la asamblea.

Más tarde, los funcionarios de la UNLP se reunieron con los decanos. Allí se decidió –como estaba previsto– volver a llamar la asamblea el miércoles. Lo que se modificó fue la sede: el segundo intento se hará en la Escuela Inchausti, en 25 de Mayo. La UNLP se ocupará de organizar el traslado de los asambleístas. “Es una locura elegir rector a 300 kilómetros de La Plata. Sería más coherente seguir discutiendo para generar las condiciones que permitieran una asamblea”, opinó Pablo Maciel, presidente de la FULP. La federación discutía anoche qué hará mañana.