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Parece una determinación un tanto ridícula, pero tratándose de competición pura, nunca conviene dejar algo sin aclarar en el reglamento. La Federación Internacional de Natación (FINA) clarificó un poco más el nuevo conjunto de reglas concernientes a los trajes de baño de los nadadores, precisando que no pueden llevar nada debajo, incluso aunque sea para proteger sus partes íntimas.

Suena extraño, pero la polémica es verídica. Sucedió esta semana en el Campeonato de Australia en Sydney, que la sueca Therese Alshammar se convirtió en la primera nadadora descalificada en una carrera por llevar dos trajes de baño, uno sobre otro, que le permitían mejorar su flotabilidad y, por lo tanto, ganar unas centésimas de segundo.

Alshammar, autorizada a nadar el Campeonato de Australia como competidora extranjera, calificó como “discriminatoria” la decisión. La sueca afirmó que pensaba que llevar un traje de baño debajo del otro para proteger sus partes íntimas estaba permitido: esto le permitió mejorar su record del mundo de 50 metros mariposa, llevándolo de 25s46 a 25s44, que fue anulado.

Parece que Alshammar, de 31 años, se sentía acomplejada. “Debajo del traje llevo otro normal porque me hace sentir segura y porque me tapa gran parte del pecho –le dijo a la cadena sueca de televisión SVT–. Está bien tener un recambio en caso de que se te rasgue el traje”, justificó.

Los dirigentes de la Federación Australiana habían indicado que las mujeres podían llevar la parte de abajo de un bikini por cuestión de intimidad, pero no un traje de baño completo. No obstante, un portavoz de la Federación australiana indicó que la FINA contactó con los organizadores del Campeonato de Australia para precisarles que las nadadoras no podían llevar nada bajo sus trajes de baño.

Además, las nuevas reglas impiden que los trajes cubran el cuello de los nadadores, no pueden ir más allá de los hombros y los tobillos ni tampoco almacenar aire. Los cambios se produjeron luego de que en 2008 se bajaran 108 records mundiales a causa de los nuevos diseños de los trajes y los materiales empleados en su fabricación.