DEPORTES
“Grondona es uno de los dos únicos tipos que saben cuánto gana Blatter”
El periodista inglés Andrew Jennings, especializado en las intimidades políticas de la FIFA, hizo una presentación en Play the Game que describe ácidamente los manejos y el entorno de Blatter.
Por Pablo Vignone
Página/12
en Dinamarca
Desde Copenhague
Más temprano que tarde, la FIFA está nuevamente en el centro de la atención en la conferencia Play the Game que se está desarrollando en esta ciudad sobre deporte en un mundo globalizado ante 220 expositores y periodistas de 47 países. Y está bajo los focos por su ausencia formal y por los nuevos cargos que se le están formulando, que salpican a Julio Grondona, vicepresidente del organismo y “uno de los tres individuos que manejan todas las finanzas de la FIFA”, en palabras del periodista inglés Andrew Jennings, el principal sabueso en temas políticos de la entidad. “Grondona maneja el dinero pero la FIFA tiene enormes dificultades financieras en este momento –afirmó Jennings–. Los próximos tres ejercicios económicos darán pérdidas: eso es un hecho.”
Después de que cuatro miembros de la FIFA renunciaran en las últimas seis semanas a concurrir al debate, fue el secretario general de la Federación Danesa de Fútbol, Jim Stjerne Hansen, un ex miembro de la FIFA, el que tuvo coraje para dar la cara, frente a dos acerbos críticos: Jennings y el alemán Jens Weinreich, editor del Berliner Zeitung.
En su presentación, Jennings realizó una ácida descripción del entorno de Blatter, incluyendo a Grondona, y denunció el tráfico de favores como el principal método proselitista de Blatter. “¿Por qué la Argentina es el segundo país que más miembros tiene en los comités de la FIFA? –se preguntó, en charla con Página/12– Porque Grondona es uno de los dos únicos individuos en el mundo que sabe cuánto gana Blatter.” El otro es el triniteño Jack Warner, titular de la Concacaf. A esos comités pertenecen el vicepresidente de la Conmebol, Eduardo de Luca; el titular del Colegio de Arbitros, Jorge Romo; el ex presidente de River, David Pintado; en la comisión técnica están Carlos Salvador Bilardo y Roberto Perfumo; y en dos comisiones distintas se anota Raúl Madero, el médico que Grondona quería adosar al cuerpo del seleccionado argentino que lidera Marcelo Bielsa.
–¿Cómo cree que Grondona llegó a ser tan poderoso en la FIFA si no habla una sola palabra de inglés? –le preguntó este diario.
–Porque habla el mismo idioma que Blatter. Que Grondona sepa cuánto gana el suizo supone un poder significativo.
Fuentes confiables aseguraron a este diario aquí que, en determinadas ocasiones, Blatter teme a las reacciones del dirigente argentino. “Si supiera inglés, acaso habría terminado presidente de la FIFA”, señalaron.
¿Habrá alguna alternativa al poder de Blatter y Cía. en el futuro inmediato? “No vemos de dónde pueda venir el desafío –coincidieron Jennings y Weinreich–, salvo que el fiscal de Zurich (que investiga las denuncias de corrupción contra el dirigente) se ponga las pilas.”
“La FIFA tiene 30 comités –explica Jennings–. Si uno se toma el trabajo de analizar la composición de cada uno, descubre cosas interesantísimas. Por ejemplo, que Alemania es el país que más miembros aporta a los comités: son 13. No es extraño, y no porque Alemania sea una potencia futbolística; ni tampoco porque el próximo Mundial se juegue allí. Es que Blatter prefiere tener contentos a los alemanes, y no que simpaticen demasiado con Franz Beckenbauer, que puede ser un rival de cuidado en el futuro dentro de la política de la FIFA.”
Los ejemplos abundaron: “Como Inglaterra criticó fuertemente a Blatter en el Congreso Extraordinario, antes de la elección –graficó Jennings–, ahora perdió poder dentro del organismo. Y un país como Samoa Americana, con 69 mil habitantes, integrante de la FIFA sólo desde hace tres años, y ubicada en el 201º lugar del ranking, tiene un asiento en el comité de asociaciones nacionales; Inglaterra no”. El fútbol samoano, sea cual fuere su minúscula dimensión, pesa en FIFA más que la poderosa Premier League.
“¿Curioso, no? Fíjese el caso de Franco Carraro”, señala Jennings. Después de dos años sin presidente, la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) tiene en Carraro su líder desde hace unos meses, luego de que Antonio Matarrese, el hombre fuerte del fútbol peninsular durante muchos años, perdiera una de las 20 vicepresidencias de la FIFA luego del congreso, a raíz de su oposición a Blatter. Carraro, que apoya al suizo, fue “premiado” con la presidencia del comité de Auditoría Interna, el que más le interesa a Blatter después de las tremendas denuncias de su corrupción en su contra, que logró controlar con la reelección. “Fiji es un bonito país, pero, ¿por qué tiene que tener más delegados que Dinamarca, si nunca jugó un Mundial?”, ironizó Jennings.
Cuando se reflotó el caso de los sobornos en el hotel Meridien de París, la noche anterior a la elección de Blatter como titular de la FIFA en 1998, en la que los miembros africanos recibieron sobres con 50 mil dólares, Hansen replicó:
–Nosotros también recibimos un sobre en París. Era el dinero que costeaba los gastos de la Federación.
Pero no supo qué contestar cuando le preguntaron:
–¿No cree que hay sistemas más transparentes para pagar cuentas que entregar sobres en hoteles a medianoche?
El dirigente danés terminó aceptando que “el sistema está basado en estos manejos oscuros (de compra de votos)” y fue aplaudido por su coraje. Hay que tenerlo para defender algo sin convicciones.