Jueves, 1 de octubre de 2009 | Hoy
DEPORTES › EL COMBINADO DE JUGADORES LOCALES FUE SUPERIOR Y SE IMPUSO 2-0 ANTE GHANA
El delantero de Boca marcó los dos goles del seleccionado alternativo de Maradona y, según la lógica del DT, se ganó la convocatoria para los últimos dos partidos de las Eliminatorias. El rival, de dudosa jerarquía, marcó muy mal y casi no inquietó.
La Selección argentina de entrecasa, con jugadores del medio local, le arrancó ayer varias sonrisas al alicaído entrenador del equipo, Diego Maradona. Ayudó y mucho el rival, Ghana, que presentó también una formación alternativa, muy ingenua a la hora de marcar y poco audaz para atacar. En definitiva, una formación de dudosa jerarquía. Las diferencias entre unos y otros fueron abismales. Pero eso no le impidió a Maradona vivir el partido como si se tratara de un sueño, en el que abundaban las gracias, las virtudes y hasta los goles.
Hauche mostraba todas sus ganas y, corriendo como un demonio, hacía estragos por la izquierda; Enzo Pérez se imponía por la derecha con un interesante ida y vuelta, e Insúa, iluminado como hacía rato no se lo veía, apoyaba unos metros más atrás. Todos jugaban para Palermo, y el goleador de Boca devolvió hasta el último peso depositado en su olfato.
A los 8 minutos cabeceó libre un centro de Hauche y un defensor ghanés salvó sobre la línea; a los 24, tras un centro de Insúa, que incluyó un lindo enganche del volante de Boca, Palermo puso un cabezazo franco por arriba del travesaño; a los 28, luego de un centro atrás de Monzón, con un toque de zurda le cruzó la pelota al arquero McCarthy y puso el 1-0, y a los 39 amplió la ventaja, con un cabezazo bombeado tras un centro de Insúa, que recibió de Monzón y, sin marca a la vista, tuvo hasta tiempo de acomodarse para sacar el envío como si fuera un tiro libre.
Lo más curioso es que ni Insúa ni Palermo ni Monzón se parecían a los de Boca. El volante, con espacio de sobra, se floreaba; el goleador estaba implacable y obligaba siempre y el defensor pasaba al ataque con una claridad y una determinación sorprendentes.
La defensa casi no sufrió sobresaltos, lo mismo que el arquero Pozo. Y en el medio, Bolatti y Vangioni jugaban más o menos como Marangoni y Burruchaga. Estaba contento Maradona y no lo ocultaba. Aplaudía constantemente y hasta saboreaba el hambre de gloria de sus jugadores.
Para la segunda parte, el asunto fue probar variantes. Sacó a Schiavi y a Enzo Pérez, después a Hauche y a Palermo y luego a Bolatti e Insúa. Y aunque Monzón siguió metiendo centros para el Titán, el juego de Argentina ya no fue tan vistoso ni tan contundente como en la primera parte.
Hubo que esperar hasta los 76 minutos para que Argentina tuviera alguna chance clara para anotar el tercero. Se lo perdió Boselli, que le pegó mordido en el área chica luego de un centro que llegó por la izquierda y que los defensores de Ghana, como toda la noche, vieron pasar.
Sobre el final del partido, Monzón se perdió lo que hubiera sido la frutilla del postre. Entró al área habilitado por Luis Rodríguez, pero terminó perdiendo ante la salida de McCarthy.
La última imagen resultó una síntesis del espíritu del partido. Los ayudantes de campo del DT de Ghana, antes del final del encuentro, se sacaban fotos con Maradona, mientras éste acompañaba desde el corralito el último esfuerzo de sus jugadores.
2- ARGENTINA
Pozzo; Canuto, Caruzzo, Schiavi, Monzón; Enzo Pérez, Bolatti, Vangioni; Insúa; Hauche, Palermo.
DT: Diego Maradona.
0- GHANA
McCarthy; Asong, Otto, Appiah, Addey; Yeboah, Owusu-Ansah, Boateng, Cofie; Boakye, Owusu.
DT: Milovan Rajevac.
Estadio: Olímpico de Córdoba.
Arbitro: Enrique Osses (Chile). Goles: 28m y 39m Palermo (A).
Cambios: 46m Insaurralde por Schiavi (A), Méndez por E. Pérez (A), Annan por Cofie (G), 57m Boselli por Palermo (A), Rodríguez por Hauche (A) y Oppong por Boakye (G), 67m Braña por Bolatti (A) y Gaitán por Insúa (A), 88m Allotey por Asong (G).
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.