Inter de Milán y Bayern Munich se enfrentarán hoy en el estadio Santiago Bernabeu (a las 15.45, televisa Fox Sports) en Madrid para suceder al Barcelona como campeón de la Liga de Campeones, y completar un “triplete” después de haber llegado ambos a la capital española como campeones de sus respectivas Ligas y Copas.

“Esperamos ganar el primer triplete de nuestra historia”, afirmó ayer el mediocampista holandés del Bayern Munich, Mark van Bommel, confiando en poder seguir la carrera que el año pasado llevó al Barça a ganar seis títulos. No será fácil para el equipo alemán, que llega a la final tras superar en semifinales al Olympique de Lyon: enfrente estará el Inter de José Mourinho, que viene de eliminar nada más y nada menos que al Barcelona de Lionel Messi.

La final, que se disputa en el estadio Santiago Bernabeu, se presenta además con el morbo añadido de ver frente a frente a dos entrenadores que se conocen perfectamente y que se caracterizan por su actitud provocadora: el maestro Van Gaal y el alumno Mourinho. Ambos llegan con la ambición de convertirse en el tercer técnico en lograr ganar la Champions League con dos clubes diferentes, tras Ernst Happel (Feyenoord en 1970 y Hamburgo en 1983) y Ottmar Hitzfield (Dortmund en 1997 y Bayern en 2001).

Mourinho, cuyo nombre suena con fuerza para sustituir la próxima temporada al chileno Manuel Pellegrini en Real Madrid, logró el trofeo europeo con el Oporto en 2004, mientras que Van Gaal hizo lo propio con el Ajax de Amsterdam en 1995.

En el césped del Bernabeu, ambos intentarán probar la superioridad de sus sistemas tácticos. “Mi filosofía es siempre atacar, jugar en el campo del oponente, mientras que Mourinho es más defensivo, pero tiene jugadores que pueden decidir el partido”, manifestó ayer el técnico holandés en rueda de prensa. Una filosofía que probablemente volverá a poner en práctica hoy, contando con el sorprendente croata Ivica Olic y Thomas Muller en la punta de ataque, siempre bien respaldado por las subidas por la banda del holandés Arjen Robben, quien volverá al Bernabeu tras haber salido del Real Madrid por la puerta de atrás, a principios de temporada.

“No sé por qué Real Madrid no lo quiso el año pasado. Es muy importante para nosotros, ha hecho goles importantes y juega muy bien para este equipo”, dijo Van Bommel, que estará acompañado por su compatriota Bastian Schweinsteiger y el turco Hamit Altintop, quien probablemente será el reemplazante del francés Franck Ribéry, suspendido. Además, en la defensa estará el defensor del seleccionado argentino Martín Demichelis.

Frente a este equipo, Mourinho recurrirá a sus armas tradicionales: la solidez atrás y la movilidad en ataque con hombres como el holandés Wesley Sneijder y los siempre peligrosos delanteros Diego Milito –también integrante de la Selección– y el camerunés Samuel Eto’o, que busca su tercera Champions.

Mourinho ya advirtió que su equipo no será el que se vio en la vuelta de las semifinales frente a Barcelona, donde presentó un sistema ultradefensivo, perdió 1-0, pero fue insuficiente para los azulgranas. El técnico portugués probablemente recurrirá a un clásico 4-3-3 en el que Eto’o y Milito estarían acompañados por el macedonio Goran Pandev. En el mediocampo estarán Dejan Stankovic, el argentino Esteban Cambiasso y Sneijder, mientras que en la zaga estarían el brasileño Maicon, cuyas subidas por la banda son decisivas, junto a Lucio, y los también argentinos Walter Samuel (otro de los seleccionados por Maradona) y Javier Zanetti, quien cumplirá su partido oficial número 700 en el Inter.