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Una de las más esperadas revanchas de los últimos tiempos del boxeo tendrá lugar esta noche en el Boardwalk Hall de Atlantic City, en los Estados Unidos. Y la protagonizará el argentino Sergio “Maravilla” Martínez. En un duelo de zurdos, el campeón mundial de los medianos en la versión del Consejo hará la primera defensa de su corona ante el estadounidense Paul Williams, quien el 5 de diciembre del año pasado lo venciera en el mismo escenario de hoy y en un fallo tan polémico que todavía sigue en discusión. Aquella vez no hubo título en disputa, pero ahora sí y eso le suma un atractivo más a un combate que será transmitido por Space a partir de las 23.

En esa noche de 2009, Martínez pagó con la derrota un precio elevado a la fatiga que lo envolvió en los últimos cuatro rounds de la pelea. Perdió claridad y continuidad, retrocedió demasiado, y eso terminó siendo aprovechado por el espigado moreno estadounidense para conseguir una victoria acaso exagerada que le interrumpió a Maravilla una racha de 29 peleas consecutivas sin perder. La historia hoy promete ser diferente. Y si en algo no debe equivocarse el campeón quilmeño es en espaciar sus ataques. Si trabaja con regularidad y velocidad, si le da salida permanente a su derecha en punta y cruzada y no va tanto para atrás, acrecentará sus chances de victoria.

La última actuación de Martínez fue una obra maestra. El 17 de abril de este año venció ampliamente por puntos al local Kelly Pavlik y se adjudicó el título del Consejo al cabo de doce asaltos perfectos que sólo ensombreció con cierta pose sobradora que suele de-sagradar a los jurados estadounidenses. Todo su amplio repertorio técnico apareció aquella vez. Es de esperar que vuelva a hacerlo esta noche. Maravilla, quien llega con un registro de 45 triunfos (24 antes del límite), dos derrotas y dos empates, es uno de los diez mejores boxeadores del momento y, cuando está inspirado, no hay dudas de ello.

Williams no le va en zaga. Es un retador calificadísimo y así lo consigna su record de 39 victorias, 27 por la vía rápida, y una derrota. Fue dos veces campeón de los welters de la OMB, superó a cinco ex campeones del mundo y cuenta con dos ventajas naturales sobre Maravilla que deberá explotar para lograr el triunfo: tiene siete centímetros más de estatura (1,85m contra 1,78m) y 15 centímetros más de alcance. Su negocio será pelear desde afuera para aprovechar sus brazos más largos. Pero la velocidad relampagueante y el talento ilimitado del quilmeño no le facilitarán la tarea.