Viernes, 22 de abril de 2011 | Hoy
DEPORTES › CRUCES POR LOS INCIDENTES EN LA CANCHA DE BOCA
Todavía dolido por la derrota 2-0 en lo que fue la continuación del partido que había sido suspendido ante Vélez, el volante de San Lorenzo Leandro Romagnoli se quejó por la actitud de la dirigencia de la entidad de Liniers durante el encuentro y la calificó como “lamentable”. Lo mismo hizo el presidente del club azulgrana, Carlos Abdo, quien aprovechó la crítica para descargar artillería pesada contra sus pares del Fortín.
“Los dirigentes de Vélez insultaban a los jugadores, gritaban al árbitro; la verdad, fue lamentable, una vergüenza”, destacó el enganche de San Lorenzo.
“Nosotros salíamos a la cancha y veíamos que se estaban agarrando a piñas y nos dijeron que había gente de la barra de Vélez. Uno no sabe mucho”, agregó el ex jugador de Veracruz de México y Sporting de Portugal, con respecto al papelón en el que se vieron envueltos los dirigentes de Vélez, por apañar el ingreso con la delegación dirigencial de dos barrabravas del club, que luego fueron descubiertos.
También dijo lo suyo ayer el presidente de San Lorenzo, Carlos Abdo, quien criticó duramente a sus pares de Vélez. “Yo soy responsable de las cosas que hago y que digo y hay dirigentes que hablan cuando no tienen que hablar, y encima hablan mal de todo el mundo, como del Comité Ejecutivo, por ejemplo”, señaló ayer Abdo en declaraciones radiales. “No hay que hablar tanto, ellos tuvieron tiempo para haber pasado el partido para otro día. Todo lo que hicieron a último momento lo tendrían que haber hecho antes”, agregó.
El dirigente se refirió, al igual que Romagnoli, al comportamiento de algunos dirigentes de Vélez durante el encuentro y remarcó que “son dirigentes y deben ser responsables por sus actos”. “Nosotros cumplimos con lo que nos recomendó la seguridad. Mandaron un policía a decirnos que no salgamos de los palcos y cumplimos con lo que nos dijeron. Si los demás no lo cumplen... Nosotros estamos satisfechos porque hicimos lo que correspondía”, dijo el directivo, quien, ironía mediante, concluyó: “Quizás en el futuro uno se tenga que portar mal para que resulten las cosas, no sé. No-sotros somos respetuosos de la ley y hacemos lo que nos dicen, si los demás no lo hacen lo lamento”.
Por su parte, el vicepresidente de Vélez, Julio Baldomar, negó que barrabravas del club hubieran ingresado con la dirigencia. “Aparentemente esta persona entró con el catering que no lo hizo Vélez, porque no estábamos con ánimo por la situación. El catering lo ofreció Boca como gentileza”, explicó, en un intento de aclarar por qué se burló la prohibición de hinchas en el encuentro, a puerta cerradas, que se coronó con una penosa pelea a golpes entre periodistas partidarios de ambos clubes, en el mismísimo palco de la Bombonera.
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