El entrenador de Atenas, Néstor García, contó la odisea que le tocó vivir a él y a todo su plantel en su regreso a Córdoba desde Comodoro Rivadavia, donde jugó el pasado domingo por la Liga Nacional de Básquet (LNB) y aseguró que “casi se cae el avión”, debido al fuerte temporal que se había desatado. “La verdad es que la pasamos muy mal. Vomitamos mucho y eso nos representa un problema físico pensando en el próximo entrenamiento. Fue una hora y media en el medio de la tormenta. Indescriptible”, señaló ayer García. El hecho sucedió el domingo por la noche en el vuelo charter que trasladaba al plantel de Atenas desde la Patagonia, donde había perdido ante Gimnasia, a Córdoba.

A la mitad del viaje se desató una fuerte tormenta que provocó turbulencias constantes. “Casi se cae el avión. De una. Es así como te lo cuento. Tuvimos que pasar por esa situación. Hoy queda como una anécdota pero fue un momento de bastante tensión”, expresó el técnico, al tiempo que narró que por las lluvias y el viento tuvieron que desviarse hacia Buenos Aires para hacer una escala. “Por suerte no pasó nada, si no hubiésemos sido la noticia del país”, remarcó.