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En el cierre de su gira por Europa, Los Pumas sufrieron una dura derrota ante Irlanda, en Dublín. El 46-24 que mostró el tanteador final marcó la mayor diferencia histórica entre ambos equipos y así el seleccionado argentino de rugby continúa sin poder ganarles a los irlandeses en su país.

El cotejo que se disputó en el Aviva Stadium contó con el peor desempeño anual de los dirigidos por Santiago Phelan que tuvieron una floja producción ofensiva y una peor contención en defensa. Con constantes fallas en los tackles y sin velocidad en los traslados, los argentinos produjeron un juego previsible y fácilmente controlable para el contrario que aprovechó cada uno de los errores con una notable contundencia.

El elenco europeo cerró la jornada con siete tries –cuatro de ellos convertidos– y un penal en su haber. Por su parte, para Argentina, el apertura Nicolás Sánchez anotó cuatro penales, mientras que los forwards Tomás Leonardi y Juan Fernández Lobbe marcaron los dos únicos tries –uno de ellos convertidos por el fullback Juan Martín Hernández–, cuando el juego ya estaba resuelto.

“Nunca pudimos tomar la iniciativa. Irlanda salió a buscar el partido y no pudimos reaccionar. Jugamos mal, hay muy pocas cosas positivas para rescatar. Habrá que analizar en qué situaciones fallamos para poder mejorar”, consideró Phelan, al término del encuentro. Además admitió que la intención era “coronar la gira de buena forma”, pero no se logró. “Tenemos que hacernos cargo de que jugamos mal y analizar en qué cosas debemos hacer hincapié para retomar el camino por el que veníamos.”

Con la abultada derrota, el seleccionado nacional cerró su excursión europea con un triunfo (26-12 ante Gales) y dos caídas (39-22 ante Francia y ayer). Así coronó un balance irregular, que motivó el análisis del DT: “Comenzamos con un muy buen partido ante Gales, donde logramos jugar como pretendíamos, y después rescatamos algunas cosas de la derrota con Francia. Hoy, en cambio, no nos salió nada de lo que habíamos planeado”.