Luego de ponerle el punto final a la parte más dura de su pretemporada en la ciudad de Tandil, y tras culminar en la segunda ubicación en el torneo de verano disputado en Mar del Plata, el entrenador de River, Ramón Díaz, piensa en ultimar detalles de cara al inicio del campeonato el segundo fin de semana de febrero, aunque no pierde de vista los dos superclásicos que debe jugar con Boca, el martes y el sábado próximos.

Pese a haber ganado el superclásico de Mar del Plata por 2-0, Ramón no se conforma y ya se mentaliza con ganar el segundo, que se disputará en Mendoza. La idea del entrenador era comenzar a delinear el equipo en el entrenamiento de ayer en el predio de Ezeiza, el primero desde su retorno de la costa, tras caer con Racing por 2-1. Sin embargo, el técnico no quedó conforme con el estado de los campos de juego del predio, y por eso, los futbolistas que jugaron el jueves ante el conjunto de Avellaneda sólo realizaron ejercicios regenerativos, y el resto practicó ejercicios de definición.

Pero Díaz no se retiró del entrenamiento sin antes pedirle a los directivos que soliciten permiso a las autoridades de la AFA para ejercitarse en su predio, en donde River finalmente llevará a cabo hoy su práctica formal de fútbol.

Aunque disputará el próximo superclásico sin presiones por haberse quedado con el primero, el técnico más ganador de la historia riverplatense planea ir con lo mejor que tiene ante Boca, por lo que dispondrá la alineación titular ante los dirigidos por Carlos Bianchi. De esta manera, y de no mediar ningún imprevisto, los elegidos para jugar en Mendoza serían los mismos que en Mar del Plata: Barovero; Mercado, Román, Bottinelli; Sánchez, Ledesma, Ponzio, Vangioni; M. Díaz; Mora, Funes Mori.

Pero, por otro lado, Díaz insiste con cerrar todos los detalles para terminar de armar el equipo de cara al semestre que se avecina. Para eso, los directivos deberán definir los dos refuerzos por los que negocian desde hace varias semanas. Cuando parecía que se reflotaba la chance de contratar a Jonathan Fabbro, principal apuntado por el entrenador, luego que desde Núñez ofrecieran cuatro millones de dólares, desde Paraguay se encargaron de mitigar las ilusiones de Ramón. “Ahora Cerro (Porteño) nos comunicó que quiere cuatro millones limpios y en efectivo, con lo que demostró que no tiene ninguna intención de vender”, aseguró Adrián Castellanos, representante del futbolista. El agente reconoció que River “está haciendo todo lo posible para traer” al jugador de 31 años.

Por otra parte, la negociación por Juan Manuel Iturbe, de Porto, tampoco parece estar muy encaminada. El propio jugador viajó a Portugal para destrabar su salida, aunque desde Núñez analizan la posibilidad de utilizar el dinero del préstamo por el juvenil para cerrar la contratación de Fabbro y satisfacer el principal deseo del técnico.