La gran revancha se pone en marcha. A partir de las 22, San Antonio, con Emanuel Ginóbili en sus filas, recibirá al campeón Miami Heat, en el primer partido de la serie final de la NBA (televisa ESPN). El cruce será una reedición de la definición del año pasado, cuando Miami se impuso 4-3 y se quedó con el título. Para Ginóbili será la quinta final que tendrá la chance de disputar, con tres conquistas.

Como el año pasado, San Antonio y Miami definirán el título de la NBA. La gran diferencia es que en esta temporada los Spurs tendrán la ventaja de la localía, con la posibilidad de definir en el At&T Center en caso de ser necesario el séptimo encuentro. Pero ante equipos de semejante categoría, con sobradas muestras de talento y personalidad, el factor cancha pasa a ser un tema menor. Incluso, en la serie del año pasado, los dos ganaron partidos como visitante. Y San Antonio estuvo a segundos de consagrarse campeón en Miami, en aquel recordado y fatídico sexto partido.

Si bien San Antonio fue el mejor equipo de la serie regular, si se busca un favorito, Miami parte un paso adelante. Es el actual bicampeón, jugará su cuarta final consecutiva y cuenta con el jugador más determinante de la competencia: LeBron James. Para apuntalar sus aspiraciones están también Dwayne Wade, Chris Bosh y el veterano tirador Ray Allen, verdugo de San Antonio la final pasada. Enfrente, los Spurs opondrán el mejor juego de conjunto del torneo, con el tridente Tim Duncan-Tony Parker-Emanuel Ginóbili como estandarte.

“No me importan los números o los porcentajes. Quiero ayudar a que el equipo gane. Esta vez queremos lograrlo”, indicó Ginóbili, que recordó con dolor la final del año pasado. “A pesar de que no jugué bien, el año pasado estuvimos muy cerca. Y eso es lo frustrante. Haber estado tan cerca, no que yo no haya estado genial”, sostuvo el crack argentino.

Para llegar a esta instancia, San Antonio superó con mucha angustia 4-3 a Dallas en los cuartos de final de la Conferencia Oeste, luego superó 4-1 a Portland en la semifinal y por último se sacó de encima 4-2 a Oklahoma en la final. En el Este, Miami barrió 4-0 a Charlotte en los cuartos de final, luego superó 4-1 a Brooklyn en semifinal y finalmente venció 4-1 a Indiana, con Luis Scola, en la final.