En una inesperada atmósfera de malestar y reproches por supuestas filtraciones internas dentro de la delegación uruguaya, el entrenador Oscar Tabárez mencionó a “gente desde adentro que pasa información”, a la vez que el capitán, Diego Lugano, se quejó porque “hay códigos y se tienen que respetar”. El goleador Luis Suárez está en condiciones de reaparecer: “Estoy recuperado, tengo el alta médica y ya me entreno a la par del plantel. Tengo muchas ganas de ayudar a mis compañeros”.

Aunque por distintos motivos, el técnico y el defensor ventilaron sus enojos durante las conferencias de prensa que ambos concedieron, con diferencia de pocos minutos. Tabárez mostró su malestar cuando fue consultado sobre la presencia de Luis Suárez en el equipo titular, durante el entrenamiento que la selección realizó ayer para el trascendental partido del jueves ante Inglaterra. “Veo que hay información que ha trascendido o que se ha espiado. Hicimos uso de nuestra prerrogativa de entrenamiento cerrado. Se ve que hay alguien que no lo respeta o hay alguien que desde adentro pasa la información”, reprochó Tabárez.

El entrenador no distinguió si la filtración de la práctica fue recogida por periodistas que accedieron de incógnito al estadio Yacaré –algo difícil de conseguir, porque decenas de policías cubren la zona– o si partió de voces dentro de la delegación uruguaya. Por pedido de Tabárez, el estadio Yacaré, de Sete Lagoas, fue tapiado antes de la llegada de Uruguay con murales de tres metros, que impiden las vistas al campo de juego desde el exterior.

Tabárez no desmintió que Suárez practicó en el equipo titular, pero no quiso confirmar si jugará de entrada ante Inglaterra. “Es una posibilidad”, se limitó a decir en la previa de un partido que puede marcar la despedida de alguno de los equipos. Uruguay perdió 3-1 en el debut ante Costa Rica e Inglaterra fue derrotada 2-1 por Italia.

“Voy a dar la formación en los últimos minutos (previos al partido con Inglaterra). Es por una cuestión de estrategia. Ante Costa Rica la di en el día previo y nadie me lo agradeció, así que espero que ahora nadie me reproche”, pidió Tabárez, cuyas reproches no fueron los únicos en la delegación uruguaya.

Lugano también mostró su enojo y fue más explícito que Tabárez al señalar a “dirigentes o jugadores” por el incumplimiento de los “códigos” del plantel, aunque sin hacer referencia a nombres propios.

Cuando un periodista consultó al defensor por el estado de su rodilla izquierda, levemente lesionada durante la derrota ante Costa Rica, Lugano no tuvo reparos en exhibir su fastidio. “Estas cosas son las que más bronca me dan”, arrancó. “Tuve un golpe (ante Costa Rica) y ayer (por el domingo) estuve en la concentración con hielo en la rodilla, pero vos no tenés por qué saber esto. Hubo compañeros míos que ni me vieron. Aquí sólo hay dirigentes y jugadores. Y también algunos empleados del hotel, pero no creo que sean tus informantes”, respondió Lugano. “Hay cosas que deben quedar en la concentración y no quedan. Es lo que más bronca me da. Hay códigos y se tienen que respetar”, se quejó.